A partir de ayer dejó de existir el Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (Ifai), para dar paso al Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai), cuyas facultades fueron potenciadas sustancialmente con la ley General de Transparencia.

El portal del organismo para la transparencia aparece con el nuevo nombre y el logo del Inai, instancia que a partir de ayer es garante del acceso a la información en todo el país.

En entrevista, la presidenta del Inai, Ximena Puente, señaló que esta modificación es la primera de una gran cantidad de cambios que deberán hacerse en un año, cuando ya entren todas las innovaciones al sistema. Esa vigencia plena, dijo, implicará el compromiso de los sujetos obligados para darle cumplimiento a la ley, y el papel del instituto como órgano garante del acceso a la información como derecho fundamental.

Provisto de recursos económicos para asumir la transformación, el Inai emprenderá desde ahora una gran cantidad de tareas, como la integración del consejo del Sistema Nacional de Transparencia, la creación de la nueva Plataforma Nacional de Transparencia –que sustituirá al ya obsoleto Infomex (como lo describe el comisionado Francisco Javier Acuña)– y la elaboración de los lineamientos de actuación del instituto y de los sujetos obligados, para dar vigencia a la ley.

En términos generales, indica el comisionado Joel Salas, se dispone de hasta un año para la recomposición del sistema de transparencia en México y adecuarlo al modelo nacional. Un proceso en el cual, espera, la participación social se incremente no sólo en cuanto a número de solicitudes de información, sino también de involucrarse, a escala estatal, en el diseño de los nuevos marcos legales locales y en la designación de los comisionados de los órganos garantes locales.

El primer compromiso operativo de la ley será la integración del nuevo consejo del Sistema Nacional de Transparencia, que presidirá Puente y en el que participarán los comisionados, quienes dirigen los órganos garantes en las 32 entidades y representantes del Archivo General de la Nación, la Auditoría Superior de la Federación y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía. Será un espacio para enriquecer la construcción de la Plataforma Nacional de Transparencia.

La integración del consejo a principios de julio, indicó Puente, será importante de cara a la construcción de la plataforma y la definición de estrategias. De entrada, indicó la presidenta del Inai, ya se han iniciado algunos trabajos sobre el diseño técnico de este instrumento que sustituirá al Infomex y cuyo financiamiento y operación corresponderá al instituto.

La construcción de la plataforma, advirtió Salas, será un proceso paulatino, aunque debe operar plenamente en un año. Se están haciendo algunas pruebas de una primera versión de transición entre el Infomex y el nuevo instrumento, que en un momento dado se pondrá a consulta de los sujetos obligados para que opinen sobre su operación, y de la sociedad para que evalúe sus méritos.

Este es un punto fundamental, porque en la plataforma se definirá técnicamente la forma en que un ciudadano podrá hacer consultas lo mismo al Poder Judicial que a la Presidencia de la República o a un municipio sobre el uso de recursos públicos, explicó Salas.

Otro factor fundamental de la instrumentación, apuntó Acuña, serán los lineamientos de operación para los sujetos obligados, que regulará la forma como se harán cargo de estas disposiciones. Serán criterios específicos ya sea para sindicatos, partidos políticos, el Poder Judicial u órganos autónomos, porque no es la misma forma de operar.