El partido Morena fue requerido por la Unidad Técnica de Fiscalización del Instituto Nacional Electoral (INE) para que presente sus argumentos sobre la queja que el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) inició en su contra, por la presunta sobrexposición de Andrés Manuel López Obrador en reuniones sistemáticas, constantes y recurrentes en todo el país.

La representación de Morena tiene un plazo de cinco días, a partir del pasado 6 de mayo, para dar a conocer su posición al respecto, aunque de antemano consideró que no hay sobrexposición, ya que López Obrador no es candidato a ningún puesto de elección popular.

Fuentes del partido dieron a conocer lo anterior en medio del debate en el INE por la decisión que tomó la víspera el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) de rencauzar una queja contra el PVEM, mediante un procedimiento especial sancionador, por haber desacatado medidas cautelares y dar mal uso al padrón electoral.

Con ello, sería la sala regional especializada del tribunal la que imponga una eventual sanción al Verde y no el órgano electoral. Morena, fuerza política promotora de la inconformidad contra el PVEM, dijo que este fallo puede dar impunidad a ese partido y retrasar la justicia electoral, en alusión a que el tribunal se ha caracterizado por imponer sanciones reducidas.

Para algunos consejeros la decisión de los magistrados resta autonomía al INE, mientras para otros permitirá rencauzar las quejas, entre ellas varias contra el Verde, que actualmente se siguen como procedimientos ordinarios sancionadores.

Trascendió que para aclarar los alcances del resolutivo, el presidente consejero del INE, Lorenzo Córdova, se comunicará con el presidente magistrado del tribunal, Constancio Carrasco.

Esto último se dio a conocer por la tarde, después que el personal del órgano electoral fue desalojado de sus oficinas por una presunta fuga de gas. Integrantes de la unidad de protección civil verificaron las instalaciones e informaron que no había tal situación. El olor que se percibía fue por el chapopote que se vertió en una calle cercana al instituto, como parte del rencarpetamiento que se llevaba a cabo, explicaron.

Por el desalojo, la Comisión de Quejas tuvo que concluir apresuradamente una reunión, donde declaró improcedente hacer un llamado a un sacerdote de Tamaulipas para que se abstenga de hacer proselitismo en favor de un candidato del PAN. Los consejeros argumentaron que no podrían hacer una convocatoria ante hechos futuros e inciertos.