Los tres detenidos a los que la Procuraduría General de la República (PGR) acusó de cometer los ataques del pasado primero de mayo en Guadalajara, Jalisco, dijeron frente a autoridades judiciales que los policías que los detuvieron les sembraron droga para justificar su detención, y rechazaron haber participado en los disturbios de esa ciudad.

De acuerdo con fuentes del Poder Judicial Federal, durante su audiencia de declaración preparatoria, efectuada en el juzgado primero de distrito de procesos penales federales, los inculpados acusaron a los policías que los aprehendieron de haber incurrido en actos de tortura sicológica durante las horas posteriores a su captura.

Inicialmente, la PGR detuvo y consignó a seis presuntos implicados en los hechos violentos de Guadalajara, pero el juez primero de distrito, Carlos Vargas, dejó en libertad a tres de ellos, porque su captura fue arbitraria o fueron obligados a dar una confesión sin presencia de un abogado.

Sin embargo, fuentes de la PGR informaron a La Jornada que cuentan con pruebas suficientes que demuestran que los seis detenidos y consignados participaron en los narcobloqueos y quema de vehículos del viernes primero de mayo en la zona metropolitana de Guadalajara, por lo que la autoridad ministerial prevé interponer un recurso de apelación contra la orden de libertad de los tres imputados.

Respecto de los tres sujetos que aún permanecen detenidos, la PGR les imputó delitos contra la salud –porque al haber sido detenidos presuntamente poseían 21 gramos de cocaína– y de delincuencia organizada.

Los detenidos son Jimmy Alejandro Solórzano Pacheco, El Jimmy; Omar Ortiz Aguayo. El Aguayo, y Víctor Manuel Peña Esquivel, El Calvo, para quienes la PGR calificó de legal su detención, porque fue en flagrante delito.