San Cristóbal de las Casas, Chis.

Los dos menores que fallecieron el viernes –una niña y un niño– en la comunidad de La Pimienta, municipio de Simojovel, debido a reacciones ocasionadas por vacunas de BCG (tuberculosis), rotavirus y hepatitis B, fueron sepultados ayer, informó Isidro Hernández, vocero de los pobladores de la localidad, quien dijo que permanecen hospitalizados 29 infantes.

Agregó en entrevista que las autoridades de Salud les dijeron que para su atención pretenden trasladar a la ciudad de México a cuatro de los niños hospitalizados, pero nosotros lo vemos difícil. Si el gobierno quiere apoyarnos, que traiga a los especialistas. No es que no queramos que se vayan para allá, sino que debe haber una buena atención aquí.

Explicó que uno de los infantes fue sepultado a las 6 horas debido a que ya se estaba descomponiendo y el otro a las 11 en el panteón de La Pimienta, donde habitan unas 2 mil 500 personas. Estamos tristes, porque es algo muy doloroso y responsabilizamos al gobierno federal de lo que pasó, pues fue el Instituto Mexicano del Seguro Social el que aplicó las vacunas el viernes, recordó.

Dijo que el informe que ellos tienen es que quedan internados 29 infantes, pero no queremos que los den de alta, porque están graves y no es cierto lo que dice el gobierno de que ya están bien.

Señaló que ayer por la tarde ingresó a la comunidad una comisión de peritos, médicos, agentes del Ministerio Público, forenses y funcionarios de diversas dependencias. Estamos de acuerdo en que se realice la investigación porque queremos que se esclarezca el caso en orden y legalmente.

El obispo Felipe Arizmendi Esquivel pidió a las autoridades que investiguen con seriedad y profesionalidad el incidente y se programen más acciones efectivas de combate a la miseria en La Pimienta, en vez de gastar tanto dinero en publicidad ­electoral.

Expresó que no se pueden descartar causas. Pueden ser jeringas contaminadas, vacunas caducadas, frascos en mal estado, errores en su aplicación, etcétera. En el fondo, hay un permanente y grave estado de desnutrición de esos niños, por el abandono y la marginación que se vive en esa población y tantas otras de nuestro querido Chiapas.