Ibeth Zamora no le teme a la estadunidense Jolene Blackshear. Tiene la certeza de que su cetro minimosca del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) no cambiará de manos, aunque respeta a su rival porque sabe que las sorpresas surgen de donde menos se lo espera.

Durante la reunión que ambas sostuvieron en las oficinas del organismo, la campeona destacó que ya estuvo analizando videos de su rival y observó que es fuerte: Acostumbra ir al choque, por lo que será una gran pelea, porque yo también tengo ese estilo.

No hizo mella en ella que su rival tenga 45 años de edad, de los cuales 20 se ha dedicado al pugilismo de paga –con un largo retiro de 2000 a 2009– y tenga una hoja de servicios de nueve pleitos ganados por seis derrotas, ante su experiencia de 22 triunfos, por cinco reveses.

La Roca planea salir de este compromiso con el puño en alto para hacer un par de defensas más y luego subir a la categoría inmediata superior para, a la brevedad posible y con la ayuda del CMB –cuyo titular Mauricio Sulaimán estaba presente– ungirse una nueva corona que la cotice para lograr bolsas más abultadas.

En su oportunidad, Jolene tuvo palabras de reconocimiento para Zamora, de quien dijo que es una campeona fuerte y está en una buena etapa, aunque advirtió: Soy una guerrera y vengo a ganar, por lo que buscaré hacer una pelea con inteligencia.

Luego de comentar que tiene casi 19 años más que su oponente, pero que eso de ninguna forma será definitivo, dijo estar lista para dar la mejor de las batallas, porque está segura de tener el boxeo necesario para regresar a su país este sábado con el cinturón verde-oro en la cintura.