Líderes priístas de tres delegaciones pidieron ayer a su dirigencia nacional revoque las candidaturas de Adrián Rubalcava, como diputado del distrito electoral XX local, y de Miguel Ángel Salazar, como jefe delegacional de Cuajimalpa, debido al daño político que le han ocasionado a este partido, e informaron que ayer mismo presentaron una solicitud para su expulsión de las filas del tricolor.

En conferencia de prensa, los representantes del PRI de las delegaciones Cuajimalpa, Álvaro Obregón, Miguel Hidalgo y Xochimilco adelantaron que para los comicios de este domingo en el Distrito Federal acudirán a las urnas, pero anularán el sufragio en favor de Rubalcava y Salazar, pues lo consideran “candidato non grato”, que no sólo se ha visto implicado en presuntos actos de corrupción, intimidación y enfrentamientos físicos, sino que ahora responsabilizan al presidente Enrique Peña Nieto de su debacle política, por lo que anticiparon una estrepitosa derrota en las urnas.

Miguel Torres, coordinador regional del PRI-DF en la zona poniente, que comprende las delegaciones Miguel Hidalgo, Álvaro Obregón y Cuajimalpa, deslindó al titular del Ejecutivo federal de la gestión de claroscuros que tuvo Rubalcava y de sus malas compañías, lo que le ha estado restando simpatías a su candidatura, por lo que consideró viable su expulsión, por el daño político que causaron al partido y para que regrese al PRD, donde tampoco nadie lo quiere.

Carlos del Valle, ex director general de Desarrollo Social en la gestión del hoy candidato a diputado local por el distrito 20, destacó que él hizo pública la relación que tenía Rubalcava con la banda de Los Claudios, y eso lo denuncié ante la Procuraduría General de la República por ser líder de ese grupo de golpeadores, pero hasta ahora no ha pasado nada.

Agregó que han sido ya varios los casos de escándalos políticos que se han ventilado ante la opinión pública y que está dañando la imagen del Revolucionario Institucional, por lo que “deben irse del PRI tanto Rubalcava como Salazar, pues no pueden estarle pegando al primer priísta del país, a alguien que les ayudó para que en 2012 ganaran. Incluso, recordó que el 19 de abril presentó una solicitud de expulsión del ex delegado, pues era absurdo que su partido postulara a alguien vinculado con delitos graves.

En su oportunidad, Antonio Rosas Santana, líder priísta de muchos años en Xochimilco, calificó de bufonada que esos dos abanderados priístas quieran achacarle al Presidente sus fracasos, y no es más que una muestra de novatez política.