Caracas.

El ex jefe de gobierno español Felipe González llegó este domingo a esta capital para colaborar en la defensa de varios líderes opositores encarcelados acusados de incitar a la violencia y conspirar contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro, en una visita considerada injerencista por el chavismo.

González, declarado hace más de un mes persona non grata por la mayoría chavista de la Asamblea Nacional, arribó al aeropuerto internacional de Maiquetía –que sirve a Caracas– poco antes del mediodía, procedente de Bogotá, constató la Afp.

Hasta que no tenga el programa (de la visita a Caracas) no tengo nada que decirles, declaró brevemente el ex mandatario español, cuyo gobierno se extendió de 1982 a 1996. Agregó que no cree que pueda reunirse con representantes del gobierno venezolano.

El gobierno de González (1982-1996) diseñó y financió los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL) paramilitares pagados por el Estado que entre 1983 y 1988 asesinaron a 28 personas presuntamente vinculadas con el grupo armado vasco ETA; nueve de sus víctimas no tenían relación alguna con los círculos del independentismo vasco.

El ex gobernante español, abogado de formación, anunció en marzo su intención de colaborar como asesor técnico exterior en la defensa de los opositores Leopoldo López y Antonio Ledezma, a petición de los familiaares de ambos.

López está preso en una cárcel en las afueras de Caracas desde hace 15 meses, acusado de incitar a la violencia en las masivas protestas de principios de 2014 contra el gobierno de Maduro, que dejaron 43 muertos.

López, cuyo juicio se reanudó el pasado lune`s, se declaró en huelga de hambre hace dos semanas junto a otro opositor preso, Daniel Ceballos, ex alcalde de San Cristóbal.

Ledezma, alcalde de Caracas, fue detenido el 19 de febrero y enviado a prisión provisional por presuntos delitos de conspiración, pero actualmente está en arresto domiciliario después de haber sido operado de una hernia a finales de abril.

El chavismo convocó a simpatizantes a concentrarse en varias plazas del país y a un gran tuitazo nacional con las etiqueta #FelipeFueraDeAquí y #VenezuelaSeRespeta, para rechazar la visita de González por considerar su presencia un acto injerencista en la política nacional.

González, que ya había aplazado un primer viaje a Caracas el pasado 17 de mayo, coincide en Venezuela con Maduro, quien el sábado anuló por motivos de salud un viaje a Europa este fin de semana, donde debía reunirse con el papa Francisco y recibir un reconocimiento

Los asuntos de Venezuela son nuestros, sólo l@s Venezolan@s tenemos potestad para asumirlos, nuestra patria entera repudia el intervencionismo, escribió el presidente venezolano en un tuit, sin referirse directamente a González

En el mismo tenor, la presidenta del Tribunal Supremo de Justicia, Gladys Gutiérrez, consideró los actos de injerencia prácticas inadmisibles.

El líder opositor Henrique Capriles agradeció la visita del González. A los vzlanos siempre nos ha caracterizado la hospitalidad, los enchufados no podrán cambiar eso, sea + que # BienvenidoFelipeGonzalez, escribió en Twitter.

El Departamento de Estado estadunidense manifestó el juevez pasado su preocupación por la salud de López y Ceballos.

El 29 de mayo los ex presidentes de Bolivia, Jorge Quiroga, y de Colombia, Andrés Pastrana, fueron recibidos en Caracas por las familias de los opositores presos y se reunieron con Ledezma, pero la Guardia Nacional de Venezuela les impidió visitar a López y a Ceballos.

En este contexto, la incertidumbre sobre la fecha de las elecciones parlamentarias se reactivó tras declaraciones contradictorias de Maduro y el defensor del pueblo, Tarek William Saab.

En un programa de televisión Saab aseguró que habría comicios legislativos a finales de 2015, según lo habló con Tibisay Lucena, presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE).

Maduro dijo el sábado que ante la cantaleta o la exigencia de la oposición de que se fije la fecha de elecciones, él podría estar de acuerdo en que se hicieran ya, pero de inmediato le pidió al CNE no dejarse presionar por los sectores extremistas.

Los partidos de oposición han criticado fuertemente la negativa del CNE a convocar oficialmente a los comicios para elegir a los futuros integrantes del parlamento, cuyo periodo debe iniciar en 2016.