El Tribunal de Derechos Humanos de Ontario, Canadá, determinó que Presteve Food Limited indemnice a dos mexicanas que laboraban para esta empresa, por medio del Programa de Trabajadores Extranjeros Temporales, y que fueron víctimas de insinuaciones y acoso sexuales, discriminación y ambiente laboral nocivo.

Las dos mujeres forman parte de un grupo de 39 trabajadores; tras la resolución una de ellas recibirá la indemnización por daños más alta en la historia del tribunal, con más de 160 mil dólares canadienses.

Para el grupo defensor de los derechos humanos que intervino en este caso, Justicia para Trabajadores Migrantes, esta resolución es histórica y muestra el abuso cometido contra los trabajadores temporales y la falta de protección del gobierno y consulado mexicanos, pero también de la corresponsabilidad de las autoridades canadienses.

Además, el caso es importante porque ha resaltado las malas condiciones laborales y de vida en las que se encuentran muchos migrantes mexicanos en Canadá, quienes llegan temporalmente con visas de trabajo; en este caso, estas mexicanas sufrieron acoso y abuso sexual de su empleador, destacó Tzazná Miranda Leal, quien funge como coordinadora de la organización denominad Justicia para Trabajadores Migrantes.

La responsabilidad del gobierno canadiense, explica la encargada del organismo, se debe a que los programas temporales sólo autorizan a los migrantes a trabajar para un único empleador y hacen casi imposible cambiar de lugar de empleo.

De esta manera, se generan condiciones de gran precariedad cuando el empleador resulta ser abusivo, ya que los trabajadores están atados por facultad del marco legislativo del programa.

Durante el caso, las demandantes relataron su experiencia con el consulado mexicano en Leamington, Canadá.

Ella testificó que el cónsul mexicano le aseguró que no podía hacer absolutamente nada, y que su mejor opción era regresar a México porque él no podía ayudarla, se asienta en el documento de 90 páginas que contiene la decisión del tribunal.

Al dar a conocer la resolución del Tribunal de Derechos Humanos de Ontario, Miranda Leal comentó que la decisión inculpa al empleador José Pratas y a Presteve Foods, pero también al Programa de Trabajadores Extranjeros Temporales de Canadá, así como a los gobiernos canadiense y mexicano.

Esperamos que esta decisión rompa el silencio de cientos de miles de trabajadores que afrontan condiciones de explotación laboral y con respecto a su vivienda, aseveró.

En un comunicado, el grupo Justicia solicita que se realicen cambios al Programa de Trabajadores Extranjeros para mejorar las condiciones laborales y que se garantice el pleno respeto a sus derechos humanos.

Además, pide al gobierno mexicano que se responsabilicen por la falta de atención que provee actualmente a los trabajadores mexicanos que residen en Canadá y ofrezca apoyo real en situaciones de abuso.

A las dos mujeres mexicanas se les identifica como OPT y MPT, debido a que la ley provincial de derechos humanos de la provincia de Ontario dicta que los nombres de las víctimas de violencia sexual se deben mantener anónimos para evitar más victimización de las mujeres y niños.