La Secretaría de Hacienda y la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE) acordaron un incremento salarial de 5.6 por ciento al salario y prestaciones para los burócratas del país, que será retroactivo al 1º de enero del año.

Este incremento, según informaron la dependencia y la central obrera que dirige Joel Ayala, beneficiará a los trabajadores de la rama operativa, es decir, administrativos y de servicios generales. El porcentaje es un promedio ponderado, pues será mayor el aumento para los trabajadores de menores ingresos.

Además, las dos partes pactaron que se continuará otorgando apoyo económico para la capacitación de los trabajadores al servicio del Estado, el cual incide en el total de prestaciones plasmadas en la ley, y también se tomarán en cuenta para la cotización de los créditos del Fovissste.

Aparte de la negociación económica hubo otros acuerdos, pues se ratificó autorizar el crédito Fovissste en pesos, que será histórico y permitirá mejores esquemas de financiamiento para los trabajadores. Para estos préstamos también se considerará el sueldo base, más la compensación garantizada, de modo que tengan mayor capacidad de compra de viviendas de calidad y ubicación geográfica, según el acuerdo firmado por el gobierno federal y la FSTSE.

Otro punto de esta negociación es la disposición de la central para que con base en la Ley del Issste y la reglamentación del Pensionissste, “los recursos de los trabajadores se inviertan en áreas estratégicas con más seguridad y rentabilidad, como: construcción de vivienda, generación de energía, producción de gas, petroquímica y carreteras…”

En el acuerdo 2015, la premisa es la permanencia en el empleo y la estabilidad con seguridad social integrada, expuso la central obrera.