Miércoles 24 de junio de 2015, p. a14
Hubo un tiempo no tan remoto en el que el centro delantero de Brasil era Careca, Romario, Ronaldo o Adriano. El puesto lo ocupa ahora Roberto Firmino, quien ayer tuvo que explicar quién es y cómo llegó a ser el atacante de la canarinha, ante la crisis en la producción nacional de esa posición, como publicó hace unos días el diario brasileño Folha de Sao Paulo. Firmino es un delantero moderno que ofrece al seleccionador Dunga la movilidad que reclama al frente del ataque. Los números justifican que el seleccionador confíe en él. Es el segundo máximo goleador de la segunda era Dunga
con cuatro tantos, por detrás de Neymar, quien suma nueve.