En lo que va del año se reporta un aumento constante en el flujo de extranjeros en México, tanto de los viajeros ordinarios (turismo, tripulación, trabajadores, entre otros) como de los cruces indocumentados.

En el contexto de la cumbre regional para analizar el tema, a realizarse hoy en Guatemala, los funcionarios mexicanos analizan nuevamente alternativas para empatar el factor de seguridad con el de desarrollo y respeto a los derechos humanos de los migrantes.

México es tránsito para miles de centroamericanos, aunque también hay repunte en personas de otras nacionalidades que, en su mayoría, buscan llegar a Estados Unidos.

El principal grupo de indocumentados es de Guatemala, con números cada vez más grandes respecto del segundo bloque de migrantes en situación irregular, integrado por hondureños.

En cuanto a las entradas regulares, todas las clasificaciones, salvo la de visitante con permiso de actividad remunerada, registran aumentos en el primer cuatrimestre de este año, respecto del mismo periodo de 2014.

El aumento en la llegada de extranjeros, en promedio, es de casi 10 por ciento, tanto los no residentes (turistas, comerciantes, tripulación, visitantes por razones humanitarias, trabajadores fronterizos y diplomáticos), como de los residentes en México, igualmente con un avance de 10 por ciento. En este grupo hay predominancia de estadunidenses y canadienses.

En cuanto a la migración no documentada, las cifras de la Secretaría de Gobernación revelan un aumento, en algunos periodos muy acentuado, de personas presentadas ante la autoridad.