Ginebra.

El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, afirmó que su decisión de dejar el cargo fue liberadora y confía en que las elecciones para definir a su sucesor se efectúen a comienzos de 2016.

En una entrevista publicada ayer, el dirigente explicó por qué el 2 de junio anunció su salida del organismo en medio de investigaciones en Estados Unidos y Suiza sobre corrupción en las altas esferas del futbol mundial.

Fue la única manera de quitar presión a la FIFA y a mis empleados, incluyendo (el apremio) de los patrocinadores. Era para sacarla a ella y a mí de la línea de fuego. dijo al diario suizo Walliser Bote.

Ante la pregunta de si daría marcha atrás con su promesa de irse, señaló: No soy candidato, soy el presidente, y quiero entregar la FIFA en buen estado, lo cual podría ser a inicios de 2016, como sugirió el 2 de junio en el congreso extraordinario de las 209 federaciones realizado en Zurich.

Blatter señaló que una fecha realista sería a inicios de 2016 para cumplir con los parámetros de una campaña electoral de cuatro meses y evitar que coincida con el Mundial de Clubes. El torneo en Japón se disputará entre el 10 y 20 de diciembre.

En sus recientes comentarios luego de la sorpresiva alocución el 2 de junio, el directivo de 79 años de edad reflexionó sobre el inminente término de sus cuatro décadas en la FIFA y lo que sigue: No me he puesto a pensar mucho al respecto y no me preocupo. La decisión de irme es liberadora, sin duda. Para la FIFA y para mí.

Indicó que tendrá unos últimos meses muy ocupados con sus funciones, pese a que se le describe como un líder que ha perdido influencia: “Aún soy el presidente de la FIFA y plenamente capaz de cumplir con mis obligaciones. El organismo y el futbol han sido lo más importante de mi vida durante 40 años.

Usaré toda mi fuerza e inspiración hasta mi último día de trabajo para traer de vuelta este barco a buen puerto.

No esclareció si está rehuyendo viajar a países donde se expondría a ser detenido por pedido de las autoridades de Estados Unidos.