Carson.

El estadunidense Timothy Bradley ganó el título welter por decisión unánime ante el mexicoestadunidense Jessie Vargas, pero en medio de un polémico desenlace anoche en Carson, California.

Bradley tuvo una pelea sin oposición durante la refriega, salvo en el doceavo episodio, cuando Vargas conectó de manera espectacular, y por única ocasión a Bradley, quien trastabilló y casi cae a la lona.

Vargas fue por su oponente, pero no pudo rematar, cuando se escuchó el aviso de los últimos diez segundos del combate y el réferi Pat Russell se confundió, dijo, con la campanada final e interrumpió el pleito.

En la esquina de Vargas pensaron que habían declarado vencedor por nocaut técnico a su peleador, pero el réferi lo que había decretado era el fin del combate. Dijo que que había escuchado la campana del final del episodio.

Yo pensé que había escuchado la campana final, y tomé mi decisión con base en lo que yo pensé que había escuchado , explicó el réferi.

Al final, Bradley recuperó el cetro de la Organización Mundial de Boxeo cuando los jueces le dieron tarjetas de 117-111, 116-112 y 115-112.

Mientras Bradley acorralaba a su rival y mantenía el castigo, Vargas buscaba lastimar en el contragolpe y aunque conectó a su rival, la pegada no fue la de otros días. Su entrenador, el mexicano Erick Terrible Morales, le pedía atacar con más fuerza.

En otro combate, el invicto mexicano Óscar Valdez se recuperó tras una caída en el primer round para vencer por decisión unánime (98-90, 98-90 y 99-90) a Rubén Tamayo, en la pelea coestelar de la velada y que significó su primer combate a 10 episodios.

En Ecatepec, estado de México, Kika Chávez venció por decisión unánime a la argentina María Magdalena Rivera. La mexicana tuvo un dominio absoluto sobre la sudamericana en toda la pelea, por lo que los jueces otorgaron tarjetas de 98-92, 99-91 y 98-92 .