Domingo 28 de junio de 2015, p. 3
La deuda pública de Grecia equivale a 180 por ciento de su producto interno bruto, lo que la convierte en la más abultada de la eurozona, respecto al tamaño de la economía. Después de haber recurrido a dos rescates internacionales entre 2010 y 2011, por un monto de 240 mil millones de euros, condicionados a medidas como recortes de gasto, aumentos de impuestos y a la edad de jubilación, nuevamente se encuentra al borde de la suspensión de pagos.
2010
23 de abril. Atenas pide una ayuda internacional, para poder cumplir con la deuda, dado que no consigue captar capitales en los mercados.
9 de mayo. Los ministros de la zona euro y el FMI acuerdan un primer rescate de 110 mil millones de euros.
2011
21 de julio. Los miembros de la zona euro acuerdan un segundo rescate por 130 mil millones de euros, con la participación de acreedores privados.
2 de septiembre. La troika (UE-FMI-BCE), asegura que Grecia incumplió con la reducción del déficit, que era una de las condiciones para recibir créditos.
31 de octubre. El entonces primer ministro, Georgious Papandreu, anuncia un referendo sobre el rescate. Dimite el 9 de noviembre.
2015
26 de enero. El candidato de la coalición de izquierda, Alexis Tsipras gana las elecciones, tras prometer acabar con las medidas de austeridad.
Febrero. El gobierno griego inicia conversaciones con sus acreedores, para negociar las condiciones de financiamiento exterior y el giro de los préstamos correspondientes.
Junio. Tras meses de negociaciones infructuosas los acreedores entregaron a Atenas una propuesta que incluía una extensión del programa de ayuda durante cinco meses más, un paquete financiero hasta de 15 mil 500 millones de euros de préstamos, a cambio de reformas y medidas de ahorro. Esta semana el gobierno griego consideró que el monto era inaceptable, pues sólo serviría para reembolsar a los acreedores los vencimientos de los próximos meses y no para reactivar la economía del país.
27 de junio. Tsipras anunció la realización de un referendo. Los ministros de Finanzas de la eurozona rechazaron la decisión y anunciaron que no hay más plazos para que Grecia cubra su deuda; el plan termina el 30 de junio, sin que se hayan girado al país la totalidad de los 240 mil millones de préstamos acordados en los dos rescates financieros.