Investigación de Susana Vargas, basada en el semanario Alarma!
Lunes 6 de julio de 2015, p. a11
Una serie de fotografías tal como fueron publicadas en el semanario Alarma!, retratos de quienes en su momento fueron calificados de mujercitos
, como sinónimo de hombres afeminados
, componen el libro del mismo título, de la historiadora del arte Susana Vargas Cervantes.
Se trata de una selección de imágenes cuya investigación se centró en cómo en México el imaginario colectivo categoriza la identidad, la sexualidad y el género
.
Al investigar cada número de Alarma!, entre 1963 y 1986, apunta Vargas Cervantes, “me sorprendió encontrar 286 historias de mujercitos; en 120 posan de manera provocadora; dos los muestran cuando no están posando y 20 los exhiben muertos”.
Las fotografías del libro retratan de manera altamente erótica a sujetos que posan y desempeñan un papel protagónico en la imagen, invirtiendo la dinámica de poder entre el fotógrafo y el fotografiado
.
Mediante sus posturas, dice la especialista, leo un acto performativo, es decir, una maniobra intencional para tomar control de su imagen. Representan el deseo del sujeto de verse como le gustaría haber sido. Ellos no quieren ser mujeres, sino apropiarse de los elementos significativos femeninos
.
Resistencia y subversión
Por ello, las fotografías reunidas se proponen funcionar como sitio de resistencia y de subversión de muchas formas de violencia en el país, tomando en cuenta que México ocupa el segundo lugar en el continente de asesinatos homofóbicos y transfóbicos, abajo de Brasil
.
En contraste con las propuestas de la investigadora Julie Butler, quien habla del género como hecho performático y sigue una línea de coherencia entre género, sexo, deseo y práctica
, Vargas Cervantes considera que en México hay una realidad diferente en el proceso de subjetivación.
“En el país es importante destacar, además de una identificación sexo-género, el binomio clase-tonalidad de piel. Como autora de la tesis de doctorado titulada Alarma! Mujercitos performando el género en un sistema sociocultural pigmentocrático,Vargas Cervantes señala que “la propuesta performativa sexo-género se tiene que contextualizar en un sistema sociocultural pigmentocrático, pues entre los mexicanos desde la colonización española, el tono de piel ha sido un marcador de clase.
El tono de piel más clara y los rasgos europeos son vistos como positivos y aspiracionales, en cambio las tonalidades morenas u oscuras están sujetas a más discriminación.
Para la autora, el performance de género que desempeñan los mujercitos en las fotografías refleja su deseo de acceder a una posición de privilegio de clase y/o color de piel. Son imágenes que apuntan a un proceso de subjetivación formado tanto por la clase y las tonalidades de la piel como por la identificación sexual y de género
.
Publicado por el sello RM, Mujercitos “es un libro de fotografías de hombres afeminados (termino acuñado por la revista Alarma!), retratados en los años 60 y 70 del siglo pasado, que posan y sonríen para la cámara, con el fin de reclamar una identidad”, concluye la investigadora.