La caficultura pasó de ser una actividad dinámica del campo –que generaba 450 mil empleos directos y 2 millones indirectos–a estar en declive, pues la producción para este ciclo no será de 3.1 millones de sacos, como afirma la Secretaría de Agricultura, ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), sino de 2.2 millones, asentó Gabriel Barreda Náder, dirigente de la Unión Nacional de Productores de Café, de la Confederación Nacional Campesina (CNC).

Las 700 mil hectáreas destinadas a la caficultura no han variado, pero la producción continúa a la baja, lo cual tiene origen en los dos sexenios del PAN, durante los que no se hizo nada en favor, dijo.

Agregó que el programa de sustitución de plantas con más de 40 años por otras resistentes a la roya naranja abre la oportunidad de recuperar la producción, aunque ello llevará de cuatro a cinco años.

Cruz José Argüello Miceli, representante no gubernamental del sistema producto café, dijo que los productores no pueden acceder al crédito, ya que Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero demanda garantías líquidas de 40 por ciento, las cuales son inalcanzables para los campesinos. Por ello se propone que los 822 millones del Fideicomiso de Recuperación del Fondo de Estabilización, Fortalecimiento y de la Cafeticultura (Fircafé) sirvan de garantía líquida y que la tasa de financiamiento baje a 10 por ciento.

El también coordinador ejecutivo de la Asociación Mexicana de la Cadena Productiva del Café afirmó que la producción en Chiapas ha caído por lo menos 60 por ciento. La situación es muy delicada, pues de los 13 estados productores, ése destina 264 mil hectáreas al cultivo del grano y están involucradas 977 comunidades, con casi 190 mil caficultores.

En el país, 70 por ciento de los productores tiene sólo una hectárea, es decir, 35 por ciento de la superficie del cultivo.

Siete organizaciones productoras de Chiapas pidieron al presidente Enrique Peña Nieto liberar los recursos del Fircafé y ordenar a la Sagarpa que agilice la entrega de recursos del programa de café. También reiteraron la demanda de que se emita una declaratoria emergente fitosanitaria por la roya del café para esa entidad.

La Unión Agrícola de Productores de Café Tacana, MAM Sociedad Cooperativa, Red Maya de Organizaciones Orgánicas, Coalición de Organizaciones de Productores de la Costa Soconusco, Unión de Ejidos de la Selva y Ramal Santa Cruz apremiaron al gobierno a impulsar un programa emergente de financiamiento para los caficultores, pues 45 por ciento no son sujetos de crédito.