El Día de Muertos puede ser cualquier fecha, pues hay vivos muertos, expresó en entrevista Alfonso Castañeda, quien este viernes 10 estrenará su espectáculo de teatro-cabaret Morirse en primavera, unipersonal escrito por él que gira en torno de cuatro personajes que temen, juegan, huyen y retan a La Muerte, la cual es también otro protagonista en esta farsa.

Las funciones serán los viernes 10, 17, 24 y 31 de julio, a las 20:30 horas, en el Centro Cultural de la Diversidad, en una serie de escenas en las cuales la muerte se burla de los vivos, pero, paradójicamente, no se hablará de la huesuda, sino de algo peor: la vida, agregó Castañeda.

Así, en la obra están una abuelita que toma ginseng para no morir; un paranoico que de tanto nadar en el miedo se quedó en la nada; un emo-dark-hipster que activa su vida cuando hay temblores, y una yucateca que con su hamaca ayuda a que la gente se suicide con estilo. La Muerte se ríe de ellos: Me tienen tanto miedo, que en realidad le tienen pavor a vivir.

Exorcizar miedos

Castañeda explicó: Una de mis obsesiones es la muerte. En realidad, quiero que estos personajes hablen por mí, que sean una metáfora de mi entorno, de mis miedos. Son historias patéticas de personas que están vivas, pero con un severo infarto existencial.

Este año, Castañeda es becario del Fonca-Creadores Escénicos 2014. A través de cuatro composiciones de su autoría le cantará a la vida, acompañado al piano por Alejandro Muraira, director musical y arreglista en este espectáculo. Las piezas son: Al son de La Muerte, Gracias al ginseng, Paranoia conspiracional y Suicidio koy koy, más el éxito del OTI Vive, un kitsch musical de Napoleón, y La vida es un momento, de Chuy Rasgado.

Para crear este espectáculo investigué desde cómo los aztecas concebían la muerte como una forma de seguir alimentando los ciclos de la vida. Me metí en temas filosóficos, tanatológicos, de logoterapia. Escuché música, leí poesía, vi artes plásticas y, por supuesto, todo el tiempo pensé en mi propia muerte. Al final, todo me llevó a una idea: la función de la muerte es la trascendencia de lo que se hizo en vida. Mi reto fue pasar todo esto con humor. De lo contrario sería solemne y pesado.

Al son de No vale nada la vida, la vida no vale nada, de José Alfredo Jiménez, estos personajes desfilarán, interactuando con el público, cantándole a la vida, compartiendo sus miedos y obsesiones por la muerte para hablar, al fin y al cabo, del complejo arte de vivir. “Morirse en primavera es una ironía llevada a escena, es un reto actoral y musical interpretar estos roles, pero también es una catarsis hablar de un tema tabú como es la muerte”.

Castañeda (Puebla, 1984) es actor, humorista y cabaretero. Ha sido alumno de bufones, como Pablo Mikozzi y Leo Bassi. En teatro, con Sandra Félix. En clown, con Jef Johnson, Darina Robles y Mauri Kurcbard. Ha tomado clases de canto y entrenamiento vocal con Margie Bermejo, Vanessa Millán y Hernán del Riego. Es creador de espectáculos de cabaret, como Conspiración Tepeyac (2010), La perfecta casada (2010), Facelosofía (2013), Morirse en primavera (2015) y próximamente Amor es... Cupido (2015). Actualmente forma parte del equipo creativo de la cantante, cabaretera y actriz Astrid Hadad.