Susana Kanahuati, de la organización Vecinos Unidos, informó que los colonos afectados por la decisión de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) de aprobar cambios de uso de suelo –de habitacionales a comerciales– en los predios ubicados en Bosques de Ciruelos 255, en la colonia Bosques de las Lomas, y Campos Elíseos 82, en la colonia Polanco, la madrugada del pasado 10 de julio, comenzaron acciones legales para ampararse contra esa decisión.

Respecto de los 14 dictámenes sobre modificaciones de uso de suelo que la ALDF devolvió al jefe de Gobierno, indicó que la Ley de Desarrollo Urbano, en el artículo 41, fracción 12, señala que “los cambios de uso de suelo tienen que subirse al pleno de la ALDF en sesión ordinaria; sin embargo, se hizo en sesión extraordinaria.

“El mismo artículo indica, en sus fracciones 13 y 14, que en el caso de las solicitudes que se devuelven con observaciones al jefe de Gobierno, la ALDF está obligada a hacerlo en un plazo máximo de no más de tres días hábiles del periodo ordinario, contados a partir de la fecha en que se aprueben las modificaciones. Si no se le notifica al jefe de Gobierno en ese plazo, la solicitud de modificación se considerará como aprobada y se publicará en la Gaceta Oficial”.

Al respecto, la organización Suma Urbana señaló que si se esperan a los tres días hábiles del periodo ordinario, tendría que ser en septiembre de la siguiente legislatura, no vaya a ser que para entonces nos digan que los tres días hábiles se cumplieron el miércoles siguiente a la fecha de aprobación, que fue el 10 de julio. Por lo tanto, pidieron a los asambleístas que terminen el proceso enviando de inmediato las solicitudes devueltas con observaciones al jefe de Gobierno”.

En la sesión que concluyó pasadas las 4 horas del viernes, del total de 47 dictámenes sobre cambios de uso de suelo sometidos a la votación del pleno, los legisladores desecharon 27, devolvieron 14 al gobierno y aprobaron seis.

Kanahuati señaló que para impulsar los cambios en el uso de suelo las autoridades capitalinas argumentan que se requieren casas de interés social; “dicen que hacen falta 70 mil viviendas, pero en la ciudad de México hay una enorme cantidad de edificios vacíos, construcciones que se hicieron al margen de la norma 26 y encareciendo el uso de suelo. Por ello, para las grandes capas sociales hoy es más difícil acceder a una vivienda.

Las autoridades están apostando a una vivienda media de 2 millones de pesos; esa vivienda atiende sólo a un porcentaje mínimo de la población que realmente necesita una casa, porque la demás ya fue expulsada de la ciudad de México. Entonces, se siguen escudando en el mayor grupo de la población que sufre esa carencia y para el cual va a seguir siendo inalcanzable, porque siguen los actos de corrupción, indicó.