Integrantes del Observatorio Eclesial (OE), del Movimiento Solidaridad Nuestra América, Organización Popular Francisco Villa de Izquierda Independiente (UPFVII) y el Movimiento Mexicano de Solidaridad con Cuba anunciaron la llegada al Distrito Federal de la 26 Caravana de Amistad Estados Unidos-Cuba, organizada por la Fundación Interreligiosa para la Organización Comunitaria (IFCO, por sus siglas en inglés) y Pastores por la Paz (Pastors for Peace).

En conferencia de prensa Thamara Barra, del Movimiento Mexicano de Solidaridad con Cuba; Gabriela Juárez Palacios, secretaria ejecutiva del OE; Gerardo Meza, de UPFVII; y Walter Martínez, del Movimiento Solidaridad Nuestra América, detallaron que hoy a las 17 horas frente a la embajada de Estados Unidos en México integrantes de Pastores por la Paz realizarán un acto público-ecuménico para exigir que se levante el inmoral bloqueo a la isla.

Señalaron que aunque ha habido avances diplomáticos entre Estados Unidos y Cuba no se ha dado aún el paso central que es el término total del bloqueo económico, financiero y comercial que asfixia al pueblo cubano, así como el cierre de la base militar de Guantánamo y la restitución al gobierno de La Habana de este territorio ocupado desde hace más de 100 años por Estados Unidos.

Este año el lema de la caravana es No descansaremos hasta que se levante el bloqueo, y en esta acción participan alrededor de 60 personas e integrantes de diversas Iglesias.

En el acto de hoy por la tarde estarán presentes el obispo de Saltillo, Raúl Vera; los pastores Luis Barrios, César Pérez y la pastora Rebeca Montemayor.

Recordaron que el 29 de junio la caravana partió desde varias rutas a través de Canadá y Estados Unidos para llegar a Texas y cruzar la frontera con México –ello se preveía que ocurriera en el transcurso de ayer, 15 de julio.

Agregaron que la caravana ha hecho paradas en 50 ciudades de Estados Unidos y lleva toneladas de ayuda humanitaria para la isla, la cual incluye cuatro vehículos y más de 50 aparatos de transporte personal para personas discapacitadas.

Confiaron en que los operativos de seguridad existentes en México por la fuga del narcotraficante Joaquín Guzmán no retrasen la llegada de los pastores al Distrito Federal.