Unos 500 maestros provenientes de municipios de las regiones sierra y huasteca hidalguense, afiliados a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), marcharon y se plantaron durante más de cinco horas frente a los dos accesos del palacio de gobierno de Pachuca, en repudio a lo que calificaron como evaluación punitiva y selectiva de mentores por parte de la Secretaría de Educación Pública de Hidalgo (SEPH), en complicidad con Sinuhé Ramírez Oviedo, líder de la sección 15 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).

En el mitin, los maestros aseguraron que desde hace algunos días la SEPH emite notificaciones de evaluación a maestros que supuestamente fueron sorteados, pero que están identificados como opositores a la reforma educativa.

Sostuvieron que las notificaciones son entregadas por directores de planteles, representantes sindicales o inspectores de zona y no propiamente por personal de la SEPH, lo que, según los mentores, es prueba clara de que Sinuhé Ramírez está del lado del gobierno, no de los maestros.

Dos horas después de iniciado el plantón, una comisión de maestros ingresó al palacio de gobierno para reunirse con representantes de la Secretaría de Gobierno de Hidalgo, con miras a evitar la evaluación en la entidad.

A su vez, profesores miembros del Movimiento de Unidad Magisterial, conformado la semana anterior por diversas expresiones sindicales, aseguraron que 17 mil trabajadores administrativos de diversas organizaciones del sector educativo en Guerrero se sumarán a la lucha contra la reforma educativa.

Mientras, 119 estudiantes pertenecientes al Frente Unido de Normales Públicas del Estado de Guerrero, de 126 registrados, presentaron ayer examen para ingresar al servicio profesional docente en el foro Mundo Imperial, que fue resguardado por unos 200 elementos de la policía estatal, sin que se registraran incidentes.