La entrega de pantallas en el contexto del llamado apagón analógico tuvo desde su origen la intención del gobierno federal de comprar el voto, afirmó el presidente del Comité Ejecutivo Nacional de Morena, Martí Batres Guadarrama.

Recordó que primero fue el envío de las notificaciones en plena campaña electoral y ahora se pretende empatar la entrega del aparato con el informe presidencial, pero advirtió que ni con esta medida va a lograr amortiguar el descontento social que hay, eso es muy difícil porque el país está en una crisis económica, de corrupción e inseguridad con la que el gobierno federal se está rompiendo a pedazos.

En entrevista luego de firmar la Carta de la ciudad de México por el derecho a la ciudad, el dirigente partidista mencionó que los 3 mil millones de pesos que se destinaron a la entrega de pantallas debieron aplicarse en otras acciones, como educación, vivienda o alimentación.

Son recursos públicos que fueron utilizados para montar un gran operativo electoral en todo el país, de compra del voto, con esas pantallas, señaló.

Agregó que aunado a la manipulación política del programa, éste se ha conducido con total opacidad, al decidir el gobierno a quiénes lo entrega y a quiénes no. Señaló que incluso han recibido información de casos en los que se ha retirado el aparato.

“Y así –cuestionó– quieren homologar los programas sociales del gobierno federal con los del Distrito Federal.”

Consideró lamentable que algunos funcionarios capitalinos, en alusión al secretario de Desarrollo Social, José Ramón Amieva, no tienen una noción clara de la política social de esta ciudad y dicen que los beneficiarios deben hacer actividades productivas.

Martí Batres agregó que es cuestionable también que el gobierno de la República no tenga una noción clara de lo que requiere el país y se ponga a repartir televisores.

Ante la escasez de recursos (la Federación) tendría que plantearse cuáles son las necesidades de la gente, en lo que es más urgente destinar el gasto, e insistió en atender temas como la educación, sobre todo en este momento en que miles de jóvenes son rechazados de las escuelas públicas.