Desmienten lo dicho por la delegación sobre autorización otorgada
No hubo supervisión de la Coordinación Nacional de Monumentos Históricos, advierten
Domingo 9 de agosto de 2015, p. 29
Habitantes del Centro Histórico de Coyoacán manifestaron que es falso que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) haya dado su aval para la rehabilitación del entorno del jardín de La Conchita en los términos en que la realizaban los trabajadores de la delegación Coyoacán, quienes retiraron la piedra bola que cubría la vialidad, la cual protegía de vibraciones inmuebles históricos como la Casa de la Malinche y el Convento de los Camilos.
En una asamblea vecinal en la que participaron colonos de Santa Catarina, El Carmen, Villa Coyoacán y La Concepción, indicaron que el permiso a que aluden las autoridades delegacionales se concedió para la nivelación de calles, cuyos trabajos debían ser supervisados por la Coordinación Nacional de Monumentos Históricos, lo que no ocurrió, y no incluía el retiro del material, como tampoco el uso de maquinaria pesada.
Frente al atrio de la iglesia de La Conchita señalaron que el envío de la carta en la que las autoridades de la delegación piden la intervención de la directora del INAH, María Teresa Franco González Salas, ocurrió hace apenas unos días, después de que habían destruido la calle aledaña a la de Higuera, considerada una de las más antiguas de la ciudad de México.
La artista plástica y propietaria de la Casa de la Malinche, Rina Lazo, consideró que no puede permitirse el saqueo del patrimonio histórico. Necesitamos que se conserve este barrio, el más antiguo de la ciudad, que no es de nosotros, sino de todos, con su empedrado, para que la gente venga a pasear y no sea un lugar de paso de vehículos
, expresó.
Leticia Perdiz, del Centro Histórico, indicó que es necesario que se hagan los trabajos con la supervisión efectiva del INAH y apegados a la conservación que debe tener como zona de monumentos históricos.
Los colonos indicaron que existe presión de algunos integrantes del comité vecinal, para que se concluyan las obras como sea
antes de que se inicie el próximo ciclo escolar, pero dado su valor histórico, agregaron, los colonos podrán opinar, pero es el INAH el que tiene la última palabra.
Antonio Purón, de Santa Catarina, se pronunció por que la delegación y el INAH se pongan de acuerdo y se conserve este sitio, con las características que lo distinguen.