Santiago.

El ex director de la policía secreta chilena, Manuel Contreras, cuyos restos fueron cremados ayer, murió la noche del viernes sin revelar información valiosa para saber la verdad y hacer justicia sobre las violaciones a los derechos humanos durante la dictadura militar de Augusto Pinochet (1973-1990), afirmó este sábado el gobierno chileno.

Contreras, creador y director de la Dirección Nacional de Inteligencia (Dina), a la que se atribuyen la mayoría de las más de 3 mil 200 víctimas y más de 38 mil torturados durante la dictadura, falleció a los 86 años en el Hospital Militar de Santiago, luego de complicaciones vinculadas con varias enfermedades, entre ellas cáncer de colon y diabetes.

Fue incinerado en un acto privado, en medio de la discreción de la familia para evitar manifestaciones de odio o alegría. Pero en cuanto se conoció la noticia de su fallecimiento, cientos de personas, con banderas y retratos de los detenidos-desaparecidos en la dictadura militar, salieron a las calles de la capital chilena a festejar.

Al grito de asesino, asesino, los manifestantes destaparon botellas de champaña, aunque muchos también lamentaron que haya muerto, porque deseaban que pasara el mayor tiempo posible de su vida en la cárcel por los crímenes de lesa humanidad que cometió.

Ordenó torturas, detenciones ilegales y ejecuciones

Tras el golpe militar que derrocó al gobierno del presidente Salvador Allende, Contreras se convirtió en el segundo personaje más poderoso y temido del régimen. Como director de la Dina ordenó detenciones ilegales, torturas, ejecuciones sumarias, desapariciones y convirtió los crímenes de lesa humanidad en política de Estado.

A diferencia de Pinochet, quien falleció hace casi 10 años sin recibir castigo, Contreras, quien murió con el grado de general del ejército en retiro, vivió sus últimos días con múltiples enfermedades y privado de libertad, cumpliendo 40 condenas por delitos como secuestros, homicidios calificados, asociación ilícita y apremios ilegítimos, que suman 520 años de presidio, subrayó la Gendarmería en un comunicado.

A esas condenas se suman otros 59 procesos pendientes, actualmente en curso, y nueve condenas a medidas alternativas a la reclusión por delitos similares a los mencionados.

Entre otros, Contreras fue condenado por el asesinato del ex canciller chileno Orlando Letelier en un atentado explosivo en Washington el 21 de septiembre de 1976. También fue hallado culpable de la muerte del ex comandante en jefe del ejército Carlos Prats y su esposa, ocurrida en Argentina en 1974, tras el estallido de una bomba adosada al automóvil en que se trasladaba el matrimonio.

Contreras también fue el impulsor de la implementación de la llamada operación Cóndor, plan coordinado de exterminio de opositores creado por las dictaduras del Cono Sur en la década de los 70.

Ha muerto llevándose información valiosa para saber la verdad y hacer justicia respecto del horror cometido por la dictadura, señaló el gobierno en su declaración, en la cual afirmó que es el momento de reafirmar nuestro compromiso con el pleno respeto y vigencia de los derechos humanos.

Definió al director de la desaparecida Dina como uno de los personajes más oscuros de nuestra historia, responsable de crímenes y graves violaciones a los derechos humanos en nuestro país. (Con información de agencias)