Nueva York. El juez estadunidense Thomas Griesa dictaminó este miércoles que los activos argentinos en Estados Unidos, a excepción de los diplomáticos y militares, se considerarían como de actividades comerciales, allanando el camino para su embargo o congelación a petición de sus inflexibles acreedores. La decisión fue tomada por el después de una audiencia de tres horas. El magistrado recibió una demanda en julio del fondo especulativo estadunidense NML Capital, quien mantiene una batalla legal en varios frentes contra Buenos Aires, a través de la cual pretende cobrar mil 800 millones de dólares adeudados por el país. Para ello, NML obtuvo en septiembre de 2013 de la justicia de Estados Unidos un recurso que obliga a Argentina a informar sobre todos sus activos en Estados Unidos. El objetivo es establecer una lista de activos que no estén protegidos por la inmunidad diplomática y reclamar su embargo al tribunal. Este tribunal ha llegado a la conclusión de que la República Argentina no ha cumplido con el mandato de septiembre de 2013, por lo cual procede aplicar esta sanción, precisó Griesa, quien está a cargo de la mayor parte de los casos que oponen a Buenos Aires con los fondos NML y su compatriota Aurelius, reacios desde hace 13 años a acordar cualquier aplazamiento o descuento de deuda de Argentina.