Jueves 3 de septiembre de 2015, p. 41
Con el propósito de diseñar vacunas y fármacos para el tratamiento de distintas infecciones, Mónica Ascensión de Nova Ocampo, investigadora de la Escuela Nacional de Medicina y Homeopatía del Instituto Politécnico Nacional, experimenta con el llamado astrovirus, el cual es poco estudiado en México
Los virus que producen sintomatología poco grave, y que por tanto son considerados de bajo riesgo, no son muy estudiados en nuestro país y no llaman la atención de los investigadores. Sin embargo, casi todos los de RNA (ácido ribonucleico), entre los cuales se encuentran los astrovirus, pueden mutar y evolucionar con la posibilidad de causar daños mayores a la salud. La catedrática indicó que influenza, VIH, dengue, rubeola, paperas, sarampión y polio son ejemplos de enfermedades originarias de virus de RNA, lo que significa que una vacuna sería efectiva durante un tiempo determinado.
Los astrovirus infectan a mamíferos y aves; son una de las principales causas de gastroenteritis aguda (GEA) en todo el mundo y la segunda causa de GEA infantil, especialmente en regiones donde existe poca higiene. Los síntomas son diarrea líquida, náuseas, vómito, fiebre, malestar generalizado y dolor abdominal.
Los niños menores de cuatro años, las personas de la tercera edad, pacientes en zonas de trasplante de médula ósea, enfermos con VIH y personas con bajas defensas son los más susceptibles de padecer una infección estomacal por astrovirus.
La investigadora argumentó que los principales focos de infección son las guarderías, por lo que recomienda que el personal se lave las manos constantemente. Con esto se evitará la diseminación no sólo de astrovirus, sino de cualquier otro patógeno.