Domingo 6 de septiembre de 2015, p. 10
La coordinación nacional de Nueva Izquierda (NI), corriente que a partir de 2008 ha tenido la presidencia nacional del PRD, reconoció que se han convertido “en una especie de conglomerado desde el cual se pueden obtener posiciones y cargos, aunque no se comparta su programa y en ocasiones ni el del partido”.
En el documento base que distribuyeron en la reunión que NI tuvo el viernes y sábado, también admitió que son una expresión “con subcorrientes, cuya vida es tan efímera, como efímero es el tiempo que dura el proceso de selección de candidatos.
“Subcorrientes que existen a partir de satisfacer las demandas de cargos, de sueldos, de canonjías económicas de quienes las integran”, definió Jesús Ortega, coordinador nacional de este grupo.
Llamó a terminar de raíz lo anterior y a deshacerse de “los condotieros (referencia a mercenarios italianos) incrustados en NI”.
Para ello, planteó una profunda reforma que incluya relaborar la propuesta programática, ética y política, así como rediseñar su concepción organizativa.
También “instituir procedimientos normativos para pertenecer y salir de NI”; realizar un censo nacional “para saber cuántos y quienes somos ahora miembros”.
Ortega, quien llamó a elegir a una nueva coordinación nacional, pidió asimismo debatir y combatir en el terreno de las ideas “a nuestros contrincantes políticos. ¡Ninguna calumnia sin respuesta; ninguna polémica rehuida, ningún ataque sin nuestra reacción!”