En los últimos 22 años la capacidad de refinación del país para ser autosustentable en la elaboración de productos petrolíferos se ha contraído paulatinamente en una cuarta parte, según se desprende de los datos contenidos en los anexos del tercer Informe de gobierno 2014-2015.

De esta manera, mientras en 1994 se tenía un índice de utilización de la capacidad instalada en refinación de 89.3 por ciento, año con año ha ido disminuyendo y hasta la primera mitad de 2015 se redujo a sólo 66 por ciento. Lo anterior ha ocasionado que México sea cada vez más dependiente del exterior en refinación, de manera que 50 por ciento del volumen de las gasolinas que se consumen en el país es importado.

Suben 30% importaciones

Sólo en el último año el volumen de las importaciones de productos petrolíferos aumentó 30 por ciento, al pasar de 592 mil barriles diarios en julio de 2014 a 853 mil barriles al día en julio de 2015, revelan los últimos Indicadores Petroleros.

Pese a que México tiene refinerías para producir gasolinas y otros petrolíferos a partir del crudo, ubicadas en Salamanca, Salina Cruz, Minatitlán, Cadereyta, Tula y Ciudad Madero, las instalaciones todavía no han sido modernizadas para procesar el crudo pesado que extrae Petróleos Mexicanos (Pemex).

Para compensar esta insuficiencia se ha recurrido continuamente a la importación de productos petrolíferos, gas natural y petroquímicos.

Sólo en lo que va de la presente administración la exportación de divisas por concepto de importación de productos petrolíferos, petroquímicos y gas natural ascienden a 69 mil 357 millones de dólares como resultado de importaciones en 2013, primer año del actual gobierno, por 28 mil 330 millones; en 2014, por 28 mil 446, y entre enero y julio de 2015, por 12 mil 581 millones de dólares.

Los informes oficiales dan cuenta del deterioro y la caída en el índice de utilización de la capacidad instalada en refinación desde 89.3 por ciento en 1994, para llegar en 2004 a 84.6 por ciento, y en lo que va de 2015 a 66 por ciento.

En el pasado quedaron los anuncios gubernamentales de ampliar la capacidad de refinación para garantizar la seguridad energética en la producción de petrolíferos, como gasolinas, diesel, combustóleo, querosenos, entre otros productos, como se divulgó, sin concretarlo, en los sexenios de Vicente Fox y Felipe Calderón.