Ernesto Fonseca Carrillo, Don Neto, uno de los principales narcotraficantes mexicanos en los años 70 y 80, obtuvo un amparo que le permitirá cumplir los últimos años de su condena en su domicilio, por el asesinato del agente de la DEA (agencia antidrogas de Estados Unidos) Enrique Camarena Salazar, pero para ello necesita que la Comisión Nacional de Seguridad, a través del Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social, y la Procuraduría General de la República (PGR) aprueben que la casa donde quedaría confinado tenga condiciones para evitar su fuga.

Funcionarios del Poder Judicial explicaron que para que Ernesto Fonseca Carrillo pueda ser beneficiado con la medida cautelar de confinamiento domiciliario, primero debe obtener el visto bueno de las autoridades respecto de la residencia propuesta por su defensa.

Fonseca Carrillo fue identificado por las autoridades federales como ex líder del cártel de Jalisco, uno de los grupos criminales mexicanos con mayor expansión en el territorio nacional y en Estados Unidos en los años 70 y 80, sin embargo, el asesinato del agente estadunidense y del piloto mexicano Eduardo Salazar provocó su captura y la de los otros líderes de la organización, entre ellos Rafael Caro Quintero (prófugo) y Miguel Ángel Félix Gallardo, El Padrino, preso en el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 1 Altiplano.

Don Neto fue sentenciado a 40 años de prisión y se encuentra preso desde 1985, y si bien, explicaron los funcionarios del Poder Judicial, obtuvo un amparo para que se le conceda el beneficio del confinamiento domiciliario, requerirá que otras autoridades distintas aprueben el sitio donde pasaría el resto de su condena.