La secretaria de Educación, Alejandra Barrales, estimó que entre 2 mil y 3 mil jóvenes se inscribieron al programa de apoyo para jóvenes que no tuvieron acceso a alguna institución de nivel bachillerato y licenciatura, lo cual es un buen número, si partimos que no hubo una campaña de difusión.

Al termino del tercer Informe del jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, confió en que serán más, porque la necesidad es real y los padres de familia andan en búsqueda de espacios para sus hijos, pero muchas veces no aprovechan esta oportunidad, al intentar ingresar al Instituto Politécnico Nacional (IPN) o la Universidsad Nacional Autónoma de México (UNAM), comentó.

El número exacto de inscritos en los programas, dijo, se conocerá en 8 o 10 días, cuando se crucen las cifras con Locatel y las propias instituciones participantes en este plan emergente, que se convirtió en política y llegó para quedarse, a fin de revertir este problema de jóvenes rechazados.

Además, recordó, se volvieron abrir plazas para algunas convocatorias y proporcionaron los números a los interesados en acercarse a la UNAM o al Poli, donde ya corrieron sus tiempos.

Consideró que la respuesta ha sido buena, pese a que no se tiene una convocatoria, sólo una campaña vía institucional, y podríamos avanzar mucho de meternos a una campaña instrumentada.

Hoy, señaló, se cuenta con la posibilidad de utilizar las instalaciones del Metro o algunos parabuses para difundir este programa, con el cual buscaremos que año con año disminuya el número de jóvenes que se quedan sin un lugar en bachillerato o licenciatura.

Sin embargo, muchos de ellos se quedan sin lugar –cuando tienen la posibilidad de inscribirse en alguna institución pública o privada– porque intentan ingresar al IPN o la UNAM, es parte de los números que debemos ver, porque hay compañeros que hacen solicitudes en varios lugares al mismo tiempo, pero vamos bien, aseguró la funcionaria.