La Unión Nacional de Técnicos y Profesionistas Petroleros (UNTPP) interpondrá demandas de nulidad del contrato colectivo de trabajo (CCT) y del reglamento para el personal de confianza de Petróleos Mexicanos (Pemex), por las afectaciones a la preservación de la fuente de trabajo y el retroceso en las prestaciones logradas.

En Pemex hay alrededor de 151 mil 300 empleados (sindicalizados, de confianza y transitorios); la plantilla laboral está sometida a una restructuración derivada de los recientes cambios jurídicos en la empresa, ahora productiva del Estado.

La unión fue creada en 2008, tiene su propio registro ante la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (5878) y es alterna –u opositora– al Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), controlado por Carlos Romero Deschamps, actual senador priísta.

Integrantes de la UNTPP advirtieron que mientras se sataniza el costo de los trabajadores de Pemex (el denominado pasivo laboral) y los funcionarios plantean un recorte de al menos 7 mil plazas, en semanas recientes se han creado 80 costosos cargos de dirección en esta empresa pública.

En conferencia de prensa, insistieron en que la verdadera intención de la administración de Pemex es desmantelar la industria petrolera nacional.

Anunciaron una serie de acciones legales, así como movilizaciones para exigir, en principio, la presentación del nuevo contrato colectivo, con anexos y convenios, firmado el mes pasado por el STPRM, cuyo contenido específico desconocen.

Con base en la poca información disponible, incluso para los propios empleados, hay nuevos esquemas de jubilaciones y pensiones, se pretende incrementar la edad de retiro al pasar de 55 a 62 años, y de 30 a 40 años de servicio, es decir, casi una década más de trabajo.

En un comunicado, emitido el 25 de agosto, Pemex informó que se alcanzó con el sindicato un convenio administrativo para reducir el pasivo pensionario en un plazo no mayor de 90 días naturales; los cambios podrían darse a conocer en noviembre. Mientras tanto, opina la unión, se apuesta a desactivar la capacidad de reacción de los petroleros.

Según los cálculos de la UNTPP, el valor real del pasivo laboral en Pemex es de 46 mil 500 millones de pesos anuales, y no la cifra estratosférica que maneja el gobierno.

La administración ya lo dijo: pretenden adelgazar el personal en 50 por ciento. La verdadera intención de la administración de Pemex es desmantelar y regalar a las empresas nacionales la principal industria petrolera y, en el camino, saquearla todo lo que se pueda dando cargos a sus amigos y familiares, advirtieron dirigentes de la unión.

Este grupo promueve, para el 4 de octubre próximo, un acto político cultural, en coordinación con trabajadores de organismos del sector cultural, en repudio al gran desfalco a la nación derivado de la llamada ronda uno. El encuentro fue denominado De la defensa heróica de Tenochtitlán a la cobarde entrega del petróleo, en el cual emitirán su posición ante las licitaciones en Pemex, proceso al que denominan gran desfalco.

La unión exige que no se satanice al trabajador petrolero mediante información gubernamental falsa y sesgada, la cual busca desmantelar la estructura e instalaciones de Pemex.