La administración capitalina anunció la compra de 500 camiones recolectores, la puesta en operación de la primera planta compactadora y el inicio del proceso de generación de electricidad, con una parte de las 13 mil toneladas de residuos sólidos que diariamente se recolectan en la ciudad, para caminar hacia una política de basura cero.

En la jornada Limpiemos nuestro México 2015, que se llevó a cabo en el Zócalo y la calle Madero, en el Centro Histórico, el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, informó que para ello se destinarán 500 millones de pesos, y a finales de año llegarán los primeros 200 camiones, que tendrán cajas europeas de última generación y cumplirán con los requisitos exigidos en materia de seguridad para los trabajadores.

Señaló que las unidades serán distribuidas en las 16 delegaciones; la meta es cambiar de un primer golpe 500 camiones con más de 20 años de antigüedad y lanzar una nueva licitación el siguiente año para adquirir otros mil, para llegar a mil 500, que traerán caja separadora de basura”, y trabajar en una nueva estrategia para la recolección.

Acompañado de funcionarios de su gabinete destacó la importancia de concientizar a la población sobre los riesgos de arrojar basura a la vía pública, sobre todo en temporada de lluvias, ya que en días recientes tuvimos que utilizar dinamita para quitar los tapones, pues sólo 3 mil toneladas, en promedio, de residuos recolectados son convertidos en composta.

El jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, participó en la jornada Limpiemos nuestro México 2015 en el Zócalo y la calle MaderoFoto María Luisa Severiano

El resto se somete a procesos de separación y reciclaje, y esperamos a principios del próximo año arrancar el proyecto de generación de basura en el Relleno Sanitario Bordo Poniente, cerrado hace tres años, donde nos atoramos muchísimo en la contratación de las garantías financieras, pero ya lo pudimos ver con una banca de segundo piso gubernamental, aclaró.

Por la administración capitalina, comentó, está todo para arrancar ese proyecto y continuar además con el retiro de chicles en varias zonas de la ciudad, como la calle Madero, Coyoacán y el Bosque de Chapultepec, donde quitar cada uno tiene un costo de 2.50 pesos. Precisó que sólo en el primer punto retiramos 40 mil al mes, equivalentes a cien mil pesos.

Tras supervisar los trabajos que se realizan diariamente en el Centro Histórico con el apoyo de 10 máquinas, las cuales trabajan 40 minutos y descansan 20, precisó que a diario tienen un avance de 100 metros, pero el problema es que todos los días vuelve a haber chicles y la Ley de Cultura Cívica no contempla ninguna sanción para esa práctica.

Por ello, indicó, vamos a buscar estrategias de participación de la ciudadanía para ver si con eso funciona mejor.