La balanza comercial de México, es decir, el saldo entre las importaciones y las exportaciones realizadas por el país, reportó un déficit de 2 mil 800 millones de dólares en agosto, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Analistas financieros coincidieron en que la caída obedeció principalmente a una fuerte desaceleración de las exportaciones manufactureras, la cual ocurrió con todo y que la depreciación del peso frente al dólar ha abaratado los productos nacionales.

La explicación de lo anterior es que la demanda mundial no está respondiendo con una mayor compra hacia México. Estados Unidos es el principal socio comercial de México y su difícil situación por el lado de la industria, es lo que ha disminuido la compra de productos e insumos mexicanos, señalaron especialistas del banco Ve por Más.

De acuerdo con los datos del Inegi, en el octavo mes de 2015 la venta de mercancías al exterior reportó una disminución anual de 6.8 por ciento, la cual fue resultado de caídas de 1.6 por ciento en las exportaciones no petroleras y de 48.3 por ciento en las petroleras, lo que de acuerdo con Invex evidencia los efectos del marcado descenso de los precios del petróleo durante el mes.

Se deteriora demanda externa

El grupo financiero puntualizó que en las exportaciones manufactureras, las automotrices se contrajeron 3.2 por ciento, lo que sugiere un deterioro de la demanda externa.

Según Ve por Más, los productos automovilísticos, que representan 30.2 por ciento de las exportaciones totales, presentaron la primera contracción del año, luego de crecimientos de dos dígitos a inicios de 2015, aunque hacia Estados Unidos este tipo de productos avanzó marginalmente 0.3 por ciento.

“Desafortunadamente, el mercado manufacturero de Estados Unidos –principal destino de exportación para los productos mexicanos– también está mostrando señales de desaceleración, por ello los envíos mexicanos en agosto se redujeron”, según analistas de Banamex.

En cuanto a las importaciones los datos del Inegi señalan que cayeron 1.9 por ciento a tasa anual, debido al descenso de 5 puntos porcentuales en las importaciones de bienes intermedios, tradicionalmente usados como insumos para la manufactura.

Por el lado de las importaciones, las de consumo crecieron 9.5 por ciento, lideradas por un incremento de bienes no petroleros, indicó Invex, que también destacó que las importaciones de capital, rubro asociado a la inversión, crecieron 5.6 por ciento, lo cual se considera positivo.