Xalapa, Ver.

El gobernador Javier Duarte de Ochoa se reunió ayer con la rectora de la Universidad Veracruzana (UV), Sara Ladrón de Guevara González, para hablar sobre el adeudo de 2 mil 400 millones de su administración con la casa de estudios.

Dos horas y media después no llegaron a un acuerdo sobre el pago. Sólo se decidió que la secretaria de administración y finanzas de la universidad y el titular de la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan) del gobierno del estado agendarán este jueves otra reunión.

Duarte de Ochoa llegó a las 9 horas a la rectoría de la UV, donde desayunó a puerta cerrada con Ladrón de Guevara.

El gobernante arribó con su esposa, Karime Macías, y el titular de la Sefiplan, Antonio Gómez Pelegrín. La rectora estuvo flanqueada por la encargada de las finanzas de la UV, Clementina Guerrero García; la secretaria académica, Leticia Rodríguez Audirac, y el secretario de la rectoría, Octavio Ochoa Contreras.

Al retirarse, el gobernador anunció que la UV y la Sefiplan trabajarán en un documento que atenderá todos los temas que tienen que ver con las finanzas de la universidad y el apoyo de la administración estatal.

El gobierno de Veracruz nunca va a dejar de apoyar a la UV. La universidad es motivo de orgullo para los veracruzanos y siempre va a contar con el respaldo y el apoyo del gobierno. Somos el gobierno que más apoya a su universidad púbica, señaló.

Ladrón de Guevara dijo que la próxima junta entre los encargados de finanzas de la UV y del estado será para revisar la disponibilidad de recursos para hacer las aportaciones gubernamentales comprometidas desde la firma del convenio de 2015.

Fue una reunión muy positiva. Siempre ha habido cordialidad. Este no es un tema personal ni político, sino de reconocimiento de una situación financiera que afecta nuestro quehacer. El gobernador está consciente y manifiesta su apoyo. Su compromiso es que antes de que concluya el año podamos estar al día, precisó.

La rectora informó que desde julio los recursos de la Federación llegan directamente a la casa de estudios sin pasar por la Secretaría de Finanzas del estado.

Raúl Arias Lovillo, ex rector de la UV (2005-2009 y 2009-2013), dijo que el adeudo a la casa de estudios pone en peligro el desarrollo de la institución.

Recordó que los problemas de flujo de recursos del gobierno estatal a la UV han sido recurrentes en años recientes. Sin embargo, nunca con la gravedad de hoy. Dos mil 400 millones de pesos son muchísimo dinero.

Consideró que el reclamo de subsidios no es mendigar un favor a las autoridades de Veracruz. El subsidio es un compromiso histórico, estipulado constitucionalmente y avalado por la UV, el gobierno del estado y la Federación.

Sobre la entrega directa de los recursos federales, comentó: “Es bueno para la UV y para todas las universidades del país, porque los rectores siempre tienen que estar luchando para que los gobiernos de los estados, sean del color que sean, les entreguen el dinero, porque siempre les jinetean la lana”.

Por separado, Víctor Arredondo Álvarez, ex rector de la Universidad Veracruzana (1997-2004), recordó que en su gestión hubo retrasos en la asignación de recursos, pero por montos muy menores, porque siempre hay que hacer gestión, jalar y hacer cabildeo. En nuestro caso fueron alrededor de 200 millones de pesos, y lo suplimos con gestiones y otros fondos.

Recordó que como secretario de Educación del estado (2004-2010), en una ocasión tuvimos que operar varias veces para que el financiamiento fuera oportuno. (Actualmente) hay algunos pendientes de esa época, dijo a La Jornada el 7 de septiembre pasado.