Depende de la Oficina de la Presidencia; Andrés Massieu, su titular
Viernes 2 de octubre de 2015, p. 16
Por medio de un decreto publicado ayer en el Diario Oficial de la Federación (DOF), la Oficina de la Presidencia de la República, a cargo de Francisco Guzmán Ortiz, fue modificada para ampliar sus funciones y áreas de responsabilidad. Ahí mismo se formalizó la creación de la Coordinación General de Política y Gobierno, al frente de la cual quedó Andrés Massieu Fernández.
Este último funcionario tenía hasta ahora la responsabilidad de coordinar la estrategia y el mensaje gubernamental, y la propia Oficina de la Presidencia. Con el nuevo encargo deberá atender las relaciones interinstitucionales con los sectores público, político, social y privado, y mantener comunicación con las dependencias y entidades de la administración pública federal para dar seguimiento y atención a los acuerdos e instrucciones del presidente Enrique Peña Nieto.
Massieu Fernández es hijo de Andrés Massieu Berlanga, quien fue secretario particular del ex presidente Carlos Salinas de Gortari. Ayer mismo el presidente Peña Nieto designó y tomó protesta al funcionario, quien es licenciado en derecho y tiene maestría en administración pública.
En la propia Oficina de la Presidencia se informó que todos los ajustes y cambios en el organigrama no precisarán de aumento de plazas ni ampliación presupuestal. De este modo, la Coordinación de Asesores del Presidente se incorpora como unidad de apoyo técnico de la Jefatura de la Oficina de la Presidencia. Esta última tendrá además una subjefatura (anteriormente coordinación) y se mantienen las coordinaciones de Opinión Pública, de Estrategia Digital Nacional y de Marca País y Medios Nacionales.
A la nueva Coordinación General de Política y Gobierno quedarán adscritas la Secretaría Técnica del Gabinete y las coordinaciones de Enlace Institucional y de Ciencia, Tecnología e Innovación. Asimismo, la Coordinación de la Crónica Presidencial dependerá de la de Comunicación Social y Vocería del gobierno.
La justificación dada para esta reorganización interna es que se requiere propiciar mayor eficacia y eficiencia en el funcionamiento de la Oficina de la Presidencia de la República.