La iniciativa del gobierno federal de crear la secretaría de cultura ‘‘no define con claridad un proyecto nacional que beneficie el desarrollo cultural del país, preserve su identidad y el patrimonio artístico e histórico’’, señaló el Sindicato de Trabajadores del Instituto Nacional de Bellas Artes.

La secretaria general de la delegación III-22 de este gremio, María del Carmen Vázquez Rosales, expuso que con la referida iniciativa ‘‘se rompe el vínculo educación-cultura, se modifican las funciones del INBA y se debilita a la institución’’.

Al participar en la jornada denominada De la heroica defensa de Tenochtitlán a la cobarde entrega del petróleo, la dirigente dijo que en este proyecto de ley no se tomó la opinión de los trabajadores de este instituto, los cuales por años han desarrollado las actividades sustantivas pilares de la educación, investigación, conservación, difusión y promoción del rescate del patrimonio cultural del país.

Los trabajadores ‘‘debemos ser actores en este proceso’’, dijo Vázquez Rosales. Apuntó que las instituciones de cultura son reconocidas en la sociedad mexicana por su experiencia y profesionalismo y tienen que participar respecto de cambios legislativos que las atañen directamente.

Hizo ver que el referido proyecto de ley crea incertidumbre en las relaciones laborales y derechos adquiridos de los trabajadores del instituto.

Juan Manuel Hernández, secretario general de la delegación III del Sindicato de Trabajadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia, señaló a su vez que lucharán por que su opinión sea considerada en esta iniciativa. Por lo pronto, han elaborado un documento que platearán a los legisladores, en el que hacen propuestas y dan su posicionamiento.

Además, pidió se que se abran a los trabajadores y distintos actores del sector de la cultura del país los debates sobre este proyecto de ley en las cámaras de Diputados y de Senadores, y anunció que llevarán a cabo movilizaciones. ‘‘La cultura es de todos, no de unos cuantos’’, concluyó.