En algunas regiones del país hay crisis de derechos humanos, reiteró ayer el titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez, pero lo más importante es el compromiso y la apertura de México con el sistema internacional, organismos como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y en estos días el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos.

Con estas visitas, dijo el ombudsman nacional, se debe ‘‘entrar en lo positivo y, como ya he dicho, que se atiendan y se cumplan sus recomendaciones’’.

En entrevista al término de la presentación de la campaña nacional de prevención contra la trata de personas, González Pérez comentó que a partir de la visita que hizo la CIDH la semana pasada a México se pusieron en la agenda temas sensibles como la desaparición forzada, la trata de personas, ejecuciones extrajudiciales, la impunidad, sobre los cuales la CNDH también ha venido insistiendo y ha investigado de manera seria, profunda e imparcial, apuntó.

Resaltó la importancia de la suma de esfuerzos en materia de derechos humanos con los organismos internacionales, ‘‘que son complementarios, no sustitutivos’’ de las acciones que se realicen a nivel nacional.

Por separado, el presidente del Senado, Roberto Gil Zuarth (PAN), coincidió con el informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en que aún hay pendientes en la materia y en que hay hechos concretos ‘‘que han lastimado y lacerado no sólo a familias enteras, sino a comunidades y sociedades’’.

Indudablemente, abundó, ‘‘compartimos esos diagnósticos que se vinculan y se concretan  a hechos específicos y reconocemos que aún se tienen muchos retos en el fortalecimiento de las instituciones. Sin embargo, creemos que se deben reconocer todos los avances que se han hecho; los tratados internacionales que crean o reconocen derechos  son realidades vigentes en México’’.

Y subrayó: ‘‘Por supuesto que tenemos que seguir avanzando, que tenemos que escuchar y reconocer y sobre todo trabajar en la dirección que nos señala la supervisión internacional y la jurisdicción internacional’’.

Pero, hizo notar, ‘‘bajo ninguna circunstancia podemos aceptar que el Estado mexicano está fallando de manera sistemática y generalizada en la defensa de los derechos humanos’’.