Jerusalén.

La ola de violencia se intensificó ese lunes en Jerusalén este, con saldo de dos jóvenes palestinos muertos y dos heridos, incluida una mujer, que participaron en ataques con arma blanca a policías, soldados y jóvenes judíos.

Dos palestinos hirieron gravemente a dos israelíes de 16 y 20 años en Jerusalén este. La policía abrió fuego, mató a un palestino y lesionó al otro, informó el vocero de la policía Micky Rosenfeld.

El ataque ocurrió en Pisgat Zeev, asentamiento judío en Jerusalén este, de mayoría árabe, ocupado por Israel desde la guerra de 1967.

Horas antes, en la Puerta de los Leones en la Ciudad Vieja, la policía advirtió a un palestino en actitud sospechosa y le ordenó sacar la mano del bolsillo. El hombre sacó un cuchillo y atacó a un agente, pero no pudo penetrar su chaleco protector y fue abatido por otros agentes.

Por la tarde, un policía enfrentó a una mujer palestina en actitud sospechosa, cerca del cuartel de la policía en una zona de Jerusalén entre los distritos oriental y occidental, dijo la vocera Luba Samri. La mujer atacó con un cuchillo y lesionó levemente al agente, que a su vez la hirió de un balazo.

En esta ola de violencia han muerto 25 palestinos, incluidos 10 atacantes con arma blanca, y cuatro israelíes, en los últimos 12 días.

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, dijo que el terrorismo con cuchillo no vencerá y acusó a los líderes árabes de incitar la violencia de las últimas semanas.

A su vez, el presidente palestino, Mahmoud Abbas, pidió al gobierno israelí frenar provocaciones y ataques de colonos en lugares santos y contra el pueblo desarmado.

En las redes sociales algunos palestinos se refirieron a la intifada de los cuchillos; los israelíes exorcizaron el miedo con humor negro.