La Secretaría de Educación Pública (SEP) informó anoche que 96 por ciento de las escuelas de educación básica del país ‘‘tuvieron clases normalmente’’. Ello, aun con el llamado del magisterio disidente para realizar un paro nacional de labores de 24 horas.

De acuerdo con los reportes de la Coordinación General de Delegaciones Federales de la dependencia, y de los gobiernos de los estados, Oaxaca –bastión de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE)– fue la entidad en la que más escuelas (65 por ciento) se sumaron al paro, mientras que en 35 por ciento de los centros de estudios del estado se desarrollaron actividades con normalidad.

En el Distrito Federal, añadió la dependencia, hubo paros parciales en sólo 22 planteles de los 10 mil que existen (5 mil públicos y el mismo número privados). Detalló además que en Chiapas, Guerrero y Michoacán, donde también hay presencia de la CNTE, se laboró en 95, 93 y 70 por ciento de las escuelas, respectivamente.

Como lo había venido advirtiendo el titular de la dependencia, Aurelio Nuño Mayer, ayer la SEP reiteró en un comunicado que ‘‘se aplicarán los descuentos respectivos a los maestros que no cumplieron con su labor docente, y que quienes sumen más de tres faltas en un mes serán separados del servicio’’.

Asimismo, se reconoció a los docentes que asistieron a sus labores ‘‘y con ello reafirmaron su compromiso de poner por encima de intereses particulares el derecho de los niños a recibir una educación de calidad’’.