Una menor de edad, alumna de segundo grado de la escuela primaria Mártires de Chicago, en Puerto Progreso, Yucatán, amenazó con un cuchillo que llevaba en su mochila a varios de sus compañeros y persiguió a uno durante el recreo con la presunta intención de herirlo.

Varios maestros sometieron a la niña de ocho años y le quitaron el arma. Según padres de familia, la dirección del colegio –uno de los más antiguos de Progreso, 36 kilómetros al norte de Mérida– llamó a los papás de la menor para que la llevaran a casa. Sin embargo, la niña retornó a clases este jueves, un día después del incidente.

La directora del plantel, Thelma León, rechazó que la alumna hubiera amenazado a sus compañeros con un cuchillo, pero tampoco desmintió la versión de alumnos y padres.

En tanto, la presidenta municipal de Naucalpan, estado de México, Claudia Oyoque Ortiz, ordenó reforzar la revisión de mochilas en planteles de educación básica, después de que el miércoles por la tarde un estudiante de secundaria, de 13 años de edad, se hirió un brazo al manipular un revólver dentro de la escuela secundaria Benemérito de las Américas, ubicada en Ciudad Satélite.

Esto es de dos: es asunto del gobierno y de los padres de familia, quienes deben supervisar a sus hijos, planteó Oyoque Ortiz. Dijo que la Procuraduría General de Justicia del Estado de México ya investiga el incidente.

Aseguró que la alcaldía de Naucalpan instruyó a la comisaría de seguridad pública intensificar los programas de seguridad en planteles. Adelantó que se ofrecerán pláticas de prevención de la violencia.

Los padres del menor fueron presentados ante el Ministerio Público el miércoles para que aclararan el origen del arma y por qué la tenía el adolescente.