Jerusalén. Los partidos del campeonato nacional de futbol israelí y de categorías inferiores con riesgo de presencia de hinchas judíos y árabes, este fin de semana, quedaron aplazados por las tensiones de los recientes días en el país, anunció ayer la policía. “Es una medida de seguridad para evitar cualquier incidente”, indicó el portavoz Micky Rosenfeld. Precisó que el riesgo no es por los jugadores, sino entre aficionados, en los partidos en zonas donde israelíes judíos y árabes están mezclados.