Un análisis sobre cómo se destinó el gasto programable de los últimos cinco años evidencia que ni la igualdad ni la equidad son prioritarios para el gobierno federal en la tarea de erradicar la pobreza. Hay gran opacidad, falta de verificación, negociaciones políticas y burocracia que convierten al gasto público en un instrumento completamente atrofiado e ineficiente.

Un grupo amplio de intelectuales, académicos, empresarios, sindicalistas y activistas de organizaciones civiles, reunidos en un foro sobre desigualdad y pobreza, exhortó a cambios de fondo en la elaboración y diseño del gasto público.

Además, en el comienzo del debate para discutir el presupuesto federal del próximo año, exigieron ser recibidos por la Cámara de Diputados y convocar a un foro amplio para construir acuerdos sobre políticas de Estado frente a la desigualdad y la pobreza, que son los principales problemas del país.

No obstante, desde ahora presentaron una serie de propuestas para realizar cambios de fondo en el presupuesto 2016, entre las cuales se incluye eliminar programas redundantes, reducir los espacios para uso político del gasto público, fortalecer las inversiones de salud y educación y en infraestructura productiva, así como mecanismos de rendición de cuentas y vigilancia ciudadana que permiten un uso eficiente y transparente de los recursos públicos.

Reunidos en el Museo de la Ciudad de México, el ex presidente del entonces Instituto Federal Electoral (IFE), José Woldenberg; el líder empresarial y presidente de Sociedad en Movimiento, Alberto Suárez Esteva; el dirigente de los telefonistas, Francisco Hernández Juárez; la directora de México Evalúa, Edna Jaime; el ex consejero del IFE y presidente de la Red por la Rendición de Cuentas, Mauricio Merino; el presidente del Instituto de Estudios para la Transición Democrática, Ricardo Becerra y Rogelio Hermosillo, coordinador de la Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, entre otros, analizaron el tema desde la perspectiva fiscal, de inversión productiva, salarios, gasto público, y transparencia y rendición de cuentas.

Los oradores forman parte de las más de 60 organizaciones civiles y casi cien intelectuales y líderes de opinión que suscribieron un pronunciamiento hecho públicos desde hace un mes para exigir a la Cámara de Diputados cambios de fondo. Y aunque en ese momento hubo diversas reacciones y respuestas a ese planteamiento, a la fecha no se ha dado ningún contacto con el Poder Legislativo.

Por ello, insistieron en ser atendidos por la mesa directiva, la Junta de Coordinación Política o la Comisión de Presupuesto de la Cámara, a fin de presentar sus planteamientos de modo directo y completo.

El foro, realizado en el contexto del Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, que se conmemoró este 17 de octubre, insistieron en cambios de fondo en las políticas económicas, fiscales, salariales, productivas, laborales y sociales para enfrentar la desigualdad y la pobreza.