París.

El presidente interino de la FIFA, el camerunés Issa Hayatou, fue operado exitosamente para recibir un trasplante de riñón, informó ayer el organismo en conjunto con la Confederación Africana de Futbol.

Era de conocimiento público que Hayatou sufría desde hace unos años una insuficiencia renal y se sometía a tratamientos de diálisis, señaló el documento.

Sin embargo, esta dolencia no le ha impedido en ningún momento asumir plenamente y sin interrupciones sus funciones en el seno de las instancias del futbol mundial y africano. Seguirá cumpliendo como estaba previsto su mandato actual como presidente interino de la FIFA, agregó.

No se informó dónde fue operado el dirigente de 69 años, aunque pasa buena parte del año en París.

Me alegran las buenas noticias que hemos recibido del personal médico. En nombre de la FIFA y en el mío propio deseo a nuestro presidente interino una pronta recuperación, dijo el secretario general del organismo, también interino, Markus Kattn.

Durante los próximos días me mantendré en contacto con él y espero que podamos volver a contar con su presencia muy pronto, añadió.

Hayatou quedó al mando de la FIFA cuando el presidente Joseph Blatter fue suspendido 90 días el pasado 8 de octubre, mientras el comité de ética investiga malos manejos financieros.

Por otro lado, la canciller de Alemania, Ángela Merkel, pidió ayer a la federación de futbol de su país que aclare las acusaciones en torno a supuestas irregularidades para la adjudicación de la sede del Mundial 2006.

De acuerdo con el diario local Hamburger Abendblatt, la funcionaria señaló que tiene la esperanza de que la Federación Alemana de Futbol (DFB) ilumine todo el asunto y transparente lo que ha ocurrido.

En conferencia de prensa en la cancillería, junto con el primer ministro australiano, Malcolm Turnbull, Merkel resaltó que la Copa del Mundo de 2006 se vivió como un antiguo cuento de hadas de verano con un estado de ánimo particular.

Resaltó que los recuerdos son inmutables, al indicar que confía en que la DFB aclare con transparencia las sospechas en torno a la posible compra de votos para que los germanos lograran organizar ese Mundial.

Desde hace varios días se investigan presuntos sobornos por parte de la candidatura alemana, presidida entonces por el ex futbolista Franz Beckenbauer, lo que ha llevado a la dimisión del presidente de la federación, Wolfgang Niersbach.