La caída de la producción automotriz es un factor de riesgo, dice
Lunes 16 de noviembre de 2015, p. 28
La reducción en la producción y las exportaciones del sector automotriz en octubre representan un factor de riesgo
para la industria nacional, lo mismo que el fortalecimiento del dólar y el menor dinamismo manufacturero de Estados Unidos, que en conjunto condicionarán el desempeño del sector en los próximos meses, advirtió la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin).
Así, 2015 se perfila como otro año con resultados modestos
para la industria pues, aunque según los últimos datos oficiales disponibles creció 1.7 por ciento en septiembre, no fue suficiente para modificar la tendencia mostrada por el sector a lo largo del año
, en el que ha tenido incrementos de sólo un punto porcentual cada mes, dijo.
En su reporte Pulso Industrial destacó que la producción de la minería acumula una caída de 6.3 por ciento entre enero y septiembre, atribuible al retroceso de 6.5 por ciento en la extracción de petróleo y gas, así como al desplome de 16 por ciento en servicios de exploración, prospección o perforación, tanto de yacimientos mineros como de campos petroleros y de gas. En general, la producción industrial mantiene un moderado ritmo de avance, acompañado por factores de riesgo que condicionarán su desempeño en los meses por venir
, insistió.
Tales factores son: el debilitamiento que mostró en octubre la industria automotriz, al registrar retrocesos interanuales de uno y 1.4 por cuento en su producción y exportación, respectivamente; el fortalecimiento del dólar, que ha encarecido las exportaciones estadunidenses en el mercado mundial afectando sus ventas al exterior y reduciendo los pedidos a México, que es uno de sus principales proveedores de insumos, así como el menor dinamismo de la industria manufacturera de ese país, hacia donde se dirige la mayoría de las exportaciones fabriles mexicanas.
Concamin puntualizó que no bastan los beneficios de la estabilidad macroeconómica, pues éstos se erosionan por factores como el tratamiento fiscal, el precio de los insumos como electricidad, combustibles, telefonía y el costo del financiamiento, así como el complicado marco regulatorio, el incumplimiento del estado de derecho, los rezagos en infraestructura, la incertidumbre jurídica y la inseguridad, que elevan los costos de los negocios formales de la economía, limitando sus posibilidades de crecimiento
.
Sobre el comportamiento de las cuatro grandes ramas industriales, alertó que la minería ha sido la más afectada este año. De enero a septiembre acumuló una caída de 6.3 por ciento en su producción, debido principalmente al retroceso de 6.5 por ciento en la extracción de petróleo y gas, así como al desplome de 16 por ciento en los servicios relacionados con la minería como la exploración y prospección minera, perforación dirigida, perforación inicial tanto para yacimientos mineros como en campos petroleros y de gas. La generación de energía eléctrica y suministro de agua y gas, creció 3.6 por ciento en los nueve meses, sobre todo debido al avance de 4.2 por ciento en la industria eléctrica.
La construcción acumuló un avance de 3.6 por ciento en enero-septiembre, pero el subsector de infraestructura apenas creció 0.7 por ciento, que para Concamin muestra estancamiento.