Un grupo de 41 artistas visuales, la mayoría jóvenes, se ha propuesto demostrar que, frente a las agudas problemáticas que aquejan a México, no debemos quedarnos sólo en la protesta, debemos hacer también propuestas.

De tal manera, desde el viernes pasado y hasta este domingo trabajan en la elaboración de 45 murales en la Unidad Habitacional Ecológica Novedades, ubicada en una de las zonas más conflictivas y transitadas de la delegación Azcapotzalco.

El propósito de esta singular serie pictórica, que en conjunto abarcará 380 metros cuadrados de extensión, es tratar de hacer contrapeso a la violencia, la criminalidad, la inseguridad y la corrupción mediante imágenes y mensajes que conmuevan, inviten a la reflexión y alienten a una vida mejor.

Memoria es el título de esta iniciativa que se debe al Colectivo C, fundado hace año y medio por la gestora cultural Raquel Gabriel, el fotógrafo Emiliano Magdaleno y el diseñador gráfico Jorge Montes.

Este proyecto nace de la necesidad de utilizar el lenguaje con el que estamos familiarizados: el arte, como una forma distinta de expresar nuestra inconformidad y desencanto por lo que ocurre en el país. No queremos quedarnos sólo en la queja, sino ofrecer una propuesta positiva, influir para dar un mensaje más alentador, explican los promotores culturales.

Tenemos la idea de usar el arte como herramienta de transformación social y queremos valernos del color y los trazos para recuperar y resignificar el paisaje urbano por medio de estas 45 piezas artísticas.

El colectivo comenzó a trabajar en esta propuesta desde hace un año. Para su consecución, ha sido esencial el apoyo económico de la sociedad, de la cual se obtuvieron los 40 mil pesos que requirió el proyecto, a través de la plataforma Fondeadora, en Internet.

También reconocen como esencial el interés y el compromiso de los vecinos de esa unidad habitacional, la cual fue construida hace 30 años y en la que hoy día residen 540 personas.

Hemos trabajado de manera muy cercana con la comunidad y al comité vecinal. No queríamos que fuera un proyecto exclusivamente nuestro, sino un trabajo colectivo, una actividad que involucre a la comunidad y artistas de la zona, destacan los integrantes del Colectivo C.

“Cuando llegamos a la unidad, los vecinos nos preguntaron que para qué sirve el arte y les contestamos que además de ser nuestro lenguaje, estamos convencidos de que puede ser una poderosa herramienta para transformar la perspectiva de la gente.

Ahora se muestran muy emocionados por ver cómo sus espacios se han convertido en un enorme lienzo o especie de galería al aire libre. Hace falta acercar el arte a la sociedad; aquí en Azcapotzalco hay dos galerías y un centro cultural. Es necesario que nos apropiemos de otros lugares y embellecer el espacio público con arte y propuestas que nos confronten y alienten desde el punto de vista social.

Integrante del comité vecinal de la Unidad Habitacional Ecológica Novedades, Silverio Ruiz aclara que desde que el colectivo les planteó el proyecto hubo gran interés por los habitantes de ese espacio, sobre todo por el contenido social en el que se sustenta.

Queremos aprovechar esta situación y que vean los jóvenes de alrededor que es válido expresarse y que puede hacerse de bella manera. El arte sí puede ayudar a transformar a las personas, siempre tiene un mensaje; en nuestro caso queremos que está unidad sigan siendo tan tranquila como hasta la fecha, explica.

La zona donde nos encontramos sí es conflictiva. Hay mucha violencia, drogadicción, muchos asaltos y narcomenudeo. Ojalá estos murales ayuden a hacer conciencia, además de que embellecen nuestro espacio.

De acuerdo con el representante vecinal, ya se instrumentó un programa de vigilancia y cuidado para mantener estas 45 obras. Es una tarea que implica involucrar a la comunidad con el trabajo de los artistas, que todos nos demos cuenta de que es en beneficio colectivo.

La convocatoria para participar en el proyecto Memoria se hizo de manera abierta, mediante redes sociales y de voz en voz, aunque algunos artistas fueron invitados de manera directa.

El único requisito era que los participantes debían evitar hacer uso o alusiones a la violencia y proponer un panorama positivo ante lo que nos enfrentamos los mexicanos en la actualidad. Se recibió en total poco más de medio centenar de propuestas, de las cuales se eligieron las 45 que se están realizando.

Las técnicas empleadas son diversas, desde grafiti hasta pintura clásica; hay también artistas de lienzo y dinámicos. Varios de los participantes gozan de gran prestigio en el medio del arte urbano, como Sego, Tellaeche, Charbel, Le Super Demon, el Colectivo Feral, Poni Kraken, Diana Barbancho, Mariana Magdaleno, Besk y Lemus.

Las piezas artísticas ocuparán los 45 muros que circundan a la unidad para protegerla. Son lienzos de tres metros de largo por 2.5 de alto. Gran parte da hacia el Eje 5 norte Montevideo, donde se construye en la actualidad la línea 6 del Metrobús. Cálculos del Colectivo C prevén que los murales serán vistos a diario al menos por 180 mil personas, que son las que transitan por el lugar.

Es esencial que los habitantes de la zona se sienta parte de estas obras, que se den cuenta de que son por y para ellos, que las aprecien, valoren y cuiden. Los murales han sido parte importante en la cultura mexicana, tenemos mucha información y cultura en ese sentido, aunque se estaba perdiendo un poco, destaca Jorge Tellaeche, quien a sus 33 años ha realizado obras monumentales para empresas trasnacionales e instituciones públicas y privadas de México y el extranjero, en diversos puntos del territorio nacional y ciudades como Nueva York e Inglaterra.

La pintura mural es muy importante en una sociedad como la nuestra, es una manera de hacer accesible el arte a las masas, para las cuales no siempre es fácil acercarse a espacios y recintos culturales. Son un medio ideal para difundir mensajes.