Indigentes demandan a Honolulú
ionina Kaneso no tiene gran cosa en el cobertizo de cinco metros ubicado en una vereda de Honolulú al que llama hogar, pero se siente agradecida por sus muebles y el horno de propano. Para su familia fue un duro golpe cuando, el año pasado, trabajadores municipales tiraron a la basura todas sus pertenencias durante una redada contra asentamientos de indigentes.
Tiran mis cosas. Mi comida, mi bebida, mis ropas, mantas y los juguetes de mi nena
, recuerda Kaneso, de 58 años y que vive con su nieta de tres años en uno de los asentamientos de personas sin hogar más grandes de todo el país.
Kaneso es una de las firmantes de una demanda presentada por la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) contra la ciudad de Honolulú, alegando que las autoridades municipales privaron a personas sin hogar de alimentos y otras propiedades en redadas sobre sus campamentos.
Los abogados del organismo presentaron la demanda en nombre de familias que carecen de hogar y que aseguran haber perdido medicamentos, documentos de identificación y objetos valiosos en las redadas. La ACLU ha pedido una orden judicial que frene futuras campañas y una compensación para sus clientes.
Trabajadores municipales barrieron varias manzanas en Kakaako en días pasados y las autoridades de la ciudad afirman que la demanda no ha alterado sus planes de realizar nuevas redadas, que podrían producirse a partir de la semana que viene.
Los equipos del ayuntamiento desmantelaron estructuras cubiertas por lonas, arrojaron basura a un camión y colocaron en contenedores verdes objetos como hornos de propano, sartenes y objetos personales.
Todo lo que sea basura o desperdicios será procesado
, dijo Ross Sasamura, director del Departamento de Mantenimiento de Instalaciones de la ciudad.
Ap