Aun cuando la tasa de desocupación en el país ha presentado una trayectoria a la baja en meses recientes, la gran mayoría de los empleos generados no son dignos, entendidos como aquellos que otorgan a los trabajadores condiciones adecuadas, tales como un ingreso salarial que les permita satisfacer sus necesidades, que les conceda seguridad en términos de salud y que también permita una jubilación honorable, sostuvo el Centro de Investigación en Economía y Negocios (Cien) del Tecnológico de Monterrey.

Según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), hasta el tercer trimestre del año la mayor parte de la población ocupada (12 millones 844 mil personas) se encuentra en el grupo de aquellos que perciben más de uno y hasta dos salarios mínimos, categoría que subió 10 por ciento en el último año, la tasa de crecimiento más significativa del periodo.

El análisis del Cien destaca que según los resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo correspondiente al tercer trimestre del año, el estado del mercado laboral continúa deteriorándose en cuanto al nivel de ingresos, el acceso a las instituciones de salud y la ocupación en el sector informal, pese al descenso marginal (0.6 por ciento) en la tasa de desempleo.

Destacó que en el último año los trabajadores que ganan más de cinco salarios mínimos registraron una caída de 3.2 por ciento, con lo que continúa siendo la categoría con el menor número de integrantes en el país en términos absolutos (3 millones 244 mil personas).

Según los datos del Inegi, desde el segundo trimestre de 2013 la cantidad de personas ocupadas que no reciben ingresos ha sido mayor que la de aquellos que perciben más de cinco salarios mínimos.

En cuanto al acceso a las instituciones de salud, alrededor de 63 por ciento de la población ocupada carece de esta prestación (31 millones 951 mil personas).

Por otro lado, el número de ocupados en el sector informal presentó una tasa de crecimiento de 2.4 por ciento en términos anuales, de tal forma que 58 por ciento del personal ocupado se encuentra laborando bajo dicha condición.

Criticó que la falta de una política industrial ha propiciado el descuido del mercado interno y con ello el surgimiento de gran número de empresas pequeñas ante la falta de oportunidades laborales.

La Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco Servitur) opinó que la desvinculación del salario mínimo como unidad de referencia para el cobro de trámites, multas, impuestos y prestaciones, entre otros, aprobada el jueves 19 de noviembre por la Cámara de Diputados, permitirá una recuperación del poder adquisitivo de los trabajadores que se perdió en 30 años, pero demandó que la recuperación del salario sea paulatina y responsable.

El presidente del organismo, Enrique Solana, pidió a los congresos de los estados que avalen la desvinculación y no se retrase más la recuperación del poder adquisitivo de los trabajadores.