Grietas en muros, pisos levantados e inclinación, que impide la apertura correcta de puertas y ventanas, son parte de las afectaciones que han sufrido alrededor de 40 viviendas del fraccionamiento Coyuya, en la colonia Santa Anita, a raíz de la construcción de dos torres de departamentos de 16 niveles en la avenida Francisco del Paso y Troncoso, en la delegación Iztacalco.

En un recorrido, los inquilinos afectados, la mayoría de la tercera edad, lamentaron que los diputados de los partidos de la Revolución Democrática, Revlucionario Institucional y Acción Nacional arropen a la inmobiliaria y no velen por el patrimonio de las familias de residentes.

Indicaron que ante esa postura acudirán al gobierno capitalino para que detenga los trabajos, que los han colocado en una situación de riesgo alto, de acuerdo con los dictámenes emitidos por personal de Protección Civil del gobierno central y de la delegación.

Marco Antonio Rivera y Raúl Aranda Celis, residentes del fraccionamiento más afectados en sus viviendas, manifestaron que la empresa VHG Promotora Iztacalco ha reconocido las afectaciones causadas, pero pretende que firmemos un convenio a modo para hacer las reparaciones, a cambio de que nos desistamos de las denuncias penales que interpusieron y de futuras reclamaciones.

Ya han venido a resanar algunas grietas, pero al paso del tiempo se vuelven a abrir. Pusieron testigos en las paredes y ahí se puede observar el daño, expresó el señor Rivera.

Aranda Celis indicó que prácticamente el conjunto habitacional de 620 viviendas se está inclinando. Son grupos de 18 casas con una sola losa, lo que ha provocado que las que están al principio sean las más dañadas, apuntó.

Evelia Vargas, quien llegó con su familia a este fraccionamiento en 1977, refirió que desde que comenzaron las excavaciones para levantar las torres de 16 niveles se comenzaron a agrietar las viviendas, pero nadie les ha hecho caso. ¿Qué es lo que están esperando las autoridades para actuar? Aquí somos, la mayoría, gente de la tercera edad; nuestras casas son nuestro único patrimonio, expresó.

Rubén Bazán, quien el pasado martes acudió con un grupo de vecinos a la ALDF para promover un punto de acuerdo que fue turnado a comisiones para exigir a la autoridad delegacional que suspenda las obras hasta en tanto se determinen las medidas de mitigación, acusó a la diputada local del PRD Elizabeth Mateos de ser quien cabildeó en contra de que se atendiera de manera urgente este asunto.