El Sistema de Transporte Colectivo (STC) planea trazar de nuevo las vías de la línea 12 del Metro para quitar las curvas uno y dos y hacerlas rectas, para lo cual, señaló su director, Jorge Gaviño, es necesario comprar los terrenos ejidales aledaños a la zona de los talleres de la terminal Tláhuac.

Entrevistado en el Museo de la Ciudad de México, dijo que se buscará negociar con los ejidatarios para llegar a un acuerdo sobre la adquisición de dichas tierras, pero que de no concretarse se tiene la opción de cambiar los peraltes y la geometría de la vía. Pero admitió que lo ideal sería hacer recto ese tramo, pues dichas curvas tienen un diámetro de menos de 200 metros.

Por lo pronto, se cambiarán los rieles, durmientes y el balasto en esas curvas, pero quedará pendiente un cambio integral de ese tramo, que por ahora no se utiliza y que servía para el retorno de los trenes, motivo por el cual se trabaja en un proyecto ejecutivo.

Gaviño dijo que los 30 trenes adquiridos para operar la llamada línea dorada están en servicio, pese a que sólo 12 han sido modificados, como recomendó la empresa Systra; sin embargo, aseguró que esto no afectará la nueva vía, ya que tiene mayor resistencia que la anterior. ¿Qué va a ocurrir? Que vamos a tener más desgaste en las ruedas de los trenes, pero se tienen que reperfilar, lo que se prevé concluya en marzo próximo.

Por otra parte, al comparecer en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, el secretario de Obras y Servicios, Édgar Tungüí, afirmó que el viaducto elevado de la línea 12 opera con plena seguridad.

Indicó que con la integración de dos nuevas estaciones y una terminal en Observatorio se facilitará la multimodalidad del transporte público.