La senadora Ana Gabriela Guevara consideró que si es necesario que México no acuda a los Juegos Olímpicos de Río –por ser desafiliado– para que el deporte cambie en todos los sentidos, valdría la pena no asistir. Además, exhortó a los competidores del país a que no tengan miedo ni se queden callados y se unan a una causa común.

La legisladora opinó que en caso de que haya motivos, el director de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), Alfredo Castillo, podría solicitar una averiguación judicial contra los ex titulares de esa entidad, ya que, al menos por omisión, incurrieron en todo lo que ahora trata de evitar el actual responsable del deporte gubernamental.

Durante el foro Deportistas sin Miedo, en el Senado, al que sólo acudieron cinco competidores de alto rendimiento –Éder Sánchez, Zudikey Rodríguez y Juan Luis Barrios, de atletismo, y Patrick Loliger y Alan Armenta, de remo–, la legisladora retomó la propuesta hecha por uno de los participantes para crear una comisión de seguimiento que se haga cargo de supervisar el camino de los deportistas desde su inicio hasta que llegan al máximo nivel, para que no se rompa su desarrollo competitivo.

Durante las tres horas y media de la reunión, fueron expuestos puntos vista de entrenadores, titulares de asociaciones deportivas y escasos atletas sobre la falta de transparencia con que se maneja la mayoría de las federaciones, así como la permanencia por varios años de algunos de los titulares de éstas.

Igualmente hicieron propuestas, a fin de que la autoridad gubernamental exija conocer el destino del dinero que se entrega a las organizaciones deportivas. Como explicó Guevara, nada debe estar por encima de las leyes mexicanas, por más acuerdos que se hayan firmado en el plano internacional para aceptar la Carta Olímpica o cualquier otro documento de orden mundial.

Dirigentes, un obstáculo

En su oportunidad, Zudikey Rodríguez, especialista en velocidad, expuso que en el país primero debemos luchar contra los dirigentes y después enfrentar a los rivales en la competencia. Opinó que sería muy lamentable que México quedara fuera de la justa olímpica de Río, porque como en su caso –podría ser su última participación–, le cortaría toda posibilidad de cumplir con un sueño.

Guevara se comprometió –ante las llamadas y mensajes que ha recibido del interior del país– a realizar reuniones en otras ciudades para que expongan sus problemas, además de aceptar que efectivamente la poca participación de atletas de alto rendimiento se debió a que pudieron tener miedo de alzar la voz.