Dirigentes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) afirmaron que las acciones de protesta encabezadas por los docentes que acudían a la evaluación del desempeño en Guerrero, prueba que los profesores de base sí rechazan esta reforma y que no es con amenazas como lograrán una participación efectiva de los maestros frente a grupo.

Agregaron que no nos asustan las amenazas de sanciones administrativas y penales contra los profesores que realizaron actos de protesta en las instalaciones donde se efectuaba la prueba de conocimientos y habilidades didácticas.

Enrique Enríquez Ibarra, secretario general de la sección 9 del Distrito Federal, agregó que sabemos que nos asiste la razón. Que no eran instructores del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) ni autoridades educativas quienes vigilaban la aplicación del examen, sino elementos policiacos.

Destacó que para gran parte de los maestros del país, Aurelio Nuño Mayer ha dejado de ser el titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP) para convertirse en el de Seguridad Pública, por la forma como ha tratado a los maestros.

Su reacción ante la protestas de los mismos educadores que la SEP determinó evaluar, dijo, demuestra que no está abierto al diálogo. Cree que podrá obligarnos con amenazas de despido para que los profesores se sumen a una reforma educativa que una vez más fue derrotada.

Por su parte, Pedro Ramírez Vázquez, integrante del magisterio disidente en el estado de México, reiteró que con la estrategia de la SEP para obligar a los maestros a evaluarse, sólo generará un círculo de simulación que dañará aún más la educación de millones de mexicanos. No es con cercos policiacos como se logrará convencer a los maestros.

En entrevista por separado, representantes y dirigentes de Michoacán y Chiapas, señalaron que hay capacidad de los docentes para organizarse, pese a todo el aparato de presión y amenazas que se ha ejercido.